Un total de 162 delincuentes que integraban seis bandas dedicadas al robo de mercadería, sicariato y privaciones de libertad fueron condenados, entre el 1° de enero y el 29 de agosto de 2024, a penas que van desde los 330 años de cárcel hasta los 405.
Las estructuras criminales operaban en los departamentos de Chalatenango, San Salvador, La Libertad, San Miguel, Usulután y Morazán.
Los delincuentes han sido procesados y condenados por los delitos de robo agravado, privación de libertad, agrupaciones ilícitas y homicidio.
La última condena fue decretada por el Tribunal Quinto contra el Crimen Organizado de San Salvador contra cuatro integrantes de una banda delincuencial que se dedicaba al robo de mercadería de furgones en diversas carreteras del país, los delincuentes recibieron penas de cárcel hasta de 363 años.
Los atracos se registraron entre 2013 y 2019 cuando furgones con diferentes mercaderías circulaban sobre las carreteras de los distritos de Chalatenango, Aguilares, San Juan Opico y Quezaltepeque. La banda cometió los ilícitos en contra de 23 víctimas de robo y 11 víctimas de privación de libertad.
«Los vehículos de carga pesada eran engañados por sujetos que se conducían en un automotor, quienes a través de señas le indicaban al piloto que llevaban problemas en sus llantas para lograr que se detuvieran», indicó el fiscal del caso.
La fuente agregó que «cuando detenían la marcha, eran obstaculizados por otro automotor para impedirles el paso y con armas en las manos obligaban al motorista a subirse al vehículo en el que se conducían y lo privaban de libertad por unas cinco horas para poder llevarse el furgón y descargar la mercadería».
En otro caso, en San Miguel, condenas de hasta 330 años de cárcel recibieron 22 integrantes de una estructura dedicada al sicariato, al ser encontrados responsables de 20 homicidios agravados, tres robos agravados, una proposición y conspiración en el delito de homicidio y agrupaciones ilícitas.
Los delitos fueron cometidos en San Miguel, Usulután, San Francisco Gotera y Morazán, entre los años 2015 y 2017.
Siempre en San Miguel, por los delitos de homicidio agravado, privación de libertad, robos y agrupaciones ilícitas, 10 integrantes de una estructura que delinquían en el oriente del país fueron condenados hasta con 405 años de cárcel.
La banda fue acusada por 16 homicidios agravados, 7 robos 3 privaciones de libertad cometidos en diferentes zonas de San Miguel, Usulután, San Francisco Gotera, Morazán, entre 2015 y 2017.
Una de las penas más altas la recibió José Pedro Salinas Morales, quien fue condenado a 405 años por su participación en 11 homicidios, 7 robos agravados y agrupaciones ilícitas.
A la banda criminal se le atribuye un cuádruple homicidio cometido el 31 de mayo del 2016, en el cantón El Amatón de Jucuapa en Usulután.
Además, solo en tres robos perpetrados en 2016, en perjuicio de tres cooperativas financieras y entidades que reciben y entregan remesas en San Miguel y Usulután; los imputados sustrajeron, utilizando armas de fuego y portando gorras, $79,771.95.
En otro hecho, el 14 de mayo, el Tribunal Segundo contra el Crimen Organizado B de San Miguel sentenció a penas de hasta 395 años de prisión a 41 pandilleros a las clicas Criminal Ganster Locos Salvatrucos, Tierra Blanca Locos Salvatruchos, Vatos Locos Salvatruchos y Molinos Locos Salvatruchos por 9 homicidios agravados, 12 extorsiones agravadas, 2 casos de proposición y conspiración para cometer el delito de homicidios agravado y organizaciones terroristas.
Los crímenes ocurrieron entre 2017 y 2019 en Usulután. Las víctimas de extorsión eran empresarios de buses, taxista y comerciantes que pagaban entre $15 y $1,600 semanales a la estructura delincuencial a cambio de no ser asesinados.
Entre las víctimas de homicidio está un hombre que fue privado de libertad el 4 de junio de 2017, en la colonia Marta Eugenia de la ciudad de Usulután.
El hombre fue llevado hasta una zona desolada donde los pandilleros habían cavado un hoyo y obligaron a la víctima a entrar. Los pandilleros apuñalaron a la víctima y posteriormente le tiraron una piedra en la cabeza.