El ministro de Salud, Francisco Alabi, brindó detalles sobre la situación actual del COVID-19 en El Salvador, e informó que hoy por hoy se cuenta con 4 variantes detectadas sobre el territorio.
Un estudio que se encargó al Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud, en Panamá, reveló que las variantes Alfa, Gamma, y Lambda circulan en el país, además de la previamente identificada Delta.
Para el desarrollo del estudio, fueron enviadas 100 muestras de salvadoreños en distintos puntos de El Salvador, se trató de pacientes ingresados por coronavirus y ciudadanos que asistieron a los tamizajez centinelas, según explicó el ministro.
La variante alfa que fue identificada por primera vez en el Reino Unido en 2020, explicó Alabi, incrementa la transmisión del virus y con ella podría aumentar su letalidad, dicho dato no se ha sustentado en estudios.
En cuanto a lambda, ha prevalecido especialmente en territorio sudamericano: Chile, Ecuador, Argentina y Perú. Mientras que la variante gamma ya se encuentra en 40 países a nivel mundial, esta última también se caracteriza por su alta transmiribilidad.
«No es culpa de ninguna de las acciones que se han tomado ante la pandemia, que tiene características de contagio a nivel internacional y lo que los países pueden hacer es retrasar su llegada», manifestó el titular del MINSAL.
Además, subrayó en el hecho de que las variantes: alfa, delta y gamma, son variantes de preocupación, las cuales pueden aumentar los niveles de transmisión y virulencia de la enfermedad.
En cuanto al grupo etario que se encuentra contagiado por las variantes antes mencionadas, el ministro mencionó que no ha sido identificado, sin embargo, destacó la importancia de que ya se conozca las variantes que están circulando en el país.
Ante la detección de nuevas variantes en el territorio salvadoreño, el ministro de Salud hizo hincapié en que se deben redoblar los esfuerzos para combatir el contagio del COVID-19 y ampliar la vacunación, acción que califica como la «única estrategia» para disminuri los efectos de la pandemia.
Con la inmunización de la población, Francisco Alabi asegura que se logrará disminuir la trnasmisibilidad del virus, «por ende, la generación de nuevas variantes que vayan a poner en riesgo la vida de la población».
«Todas las personas que reciben su vacunación contra el COVID-19 están protegidas de la letalidad. Sabemos que la vacunación no es 100 % segura para evitar el coronavirus, pero sí es segura para evitar una complicación», expresó el funcionario.
Hasta este día, el Gobierno de El Salvador continúa desarrollando su Plan Nacional de Vacunación de forma acelerada, 4,664,353 dosis anti-COVID-19 han sido aplicadas, y al menos 1,630,122 salvadoreños han concluído con su proceso de inmunización. Sin embargo, aún falta por recorrer para poder llegar a la meta establecida de 4.5 millones de personas vacunadas.
Por su parte, el presidente Nayib Bukele, reiteró la importancia de cumplir con las medidas de bioseguridad y la aplicación de la vacuna contra la COVID-19.