Un grupo de 51 inmigrantes fue arrestado hoy frente a la Casa Blanca luego de bloquear el acceso en un acto de desobediencia civil. Videos muestran cómo los activistas se sentaron justo frente a la valla que colinda con el recinto presidencial y gritaron consignas en las que exigieron al presidente Joe Biden y a la vicepresidenta Kamala Harris cumplir con la promesa que les fue hecha antes de las elecciones: dar un camino a la ciudadanía a millones de inmigrantes, quienes son parte «esencial» de la economía del país.
El número de personas que, prácticamente, se hicieron arrestar es simbólico, ya que se requiere de 51 votos en el Senado para aprobar un paquete conocido como la «Reconciliación», un millonario ajuste presupuestario para el país en el que se incluyen temas migratorios y el otorgar residencias permanentes y, eventualmente, una ciudadanía para algunos inmigrantes que estén calificados.
Los demócratas tienen 50 asientos, de los 100 disponibles, en el Senado. El voto extra vendría de la vicepresidenta Harris, quien tiene el poder de desbloquear negociaciones en la cámara alta.
Esta semana es crucial en Washington D.C. ya que el Congreso se pone de acuerdo sobre la agenda presupuestaria del presidente Biden. La esperanza de los inmigrantes está puesta en el paquete de la Reconciliación, un mecanismo que permitiría aprobar la ciudadanía solo con los 51 votos demócratas. La semana pasada la principal consejera del Senado concluyó, por segunda vez, que los demócratas no deberían incluir reformas en inmigración dentro del paquete del presupuesto.
En la protesta de hoy, que reunió a unas 500 personas, diferentes organizaciones hicieron hincapié en que la decisión del parlamentario no es vinculante y que tanto Harris como los líderes demócratas del Congreso tienen el poder para hacer avanzar la añorada ciudadanía para los inmigrantes.
«Nos presentamos a la puerta del presidente hoy para dejarle saber a él y a la vicepresidenta que un camino a la ciudadanía para los soñadores, personas con TPS, y trabajadores del campo no es negociable», dijo en su cuenta de Twitter el delegado estatal de Maryland Gabriel Acevero, del distrito 39.