A pesar de sus 85 años, Hipólito Meléndez recorre a diario las calles del distrito de Corinto, en Morazán Norte, para vender dulce de panela y algunos productos básicos como café y frijol, los cuales ofrece en una carreta de mano.
Este oficio lo ha llevado a cabo por más de 50 años en la localidad, pues productos como el dulce de panela los adquieren las moliendas de la zona, y el café también es producido en las fincas de la zona, igualmente que los granos básicos.
Él destacó que siempre hay una oportunidad para obtener ingresos, que es clave tener paciencia y perseverancia para salir adelante.
«Comercio siempre hay, lo único que se requiere es paciencia, porque uno tiene que ir a las casas a ofrecer el producto. Lo bueno es que las personas ya me conocen y saben que lo que vendo es bueno», comentó Meléndez.
Anteriormente, este hombre también se desempeñó en la agricultura y como jornalero, pero a medida que fueron avanzando los años dejó de ejercer estos oficios, pues le requerían un mayor desgaste físico, y decidió dedicarse únicamente a la venta del producto artesanal y los granos.
Este adulto mayor afirmó que tiene hijos que a causa de enfermedades congénitas dependen de él, y esto es lo que lo motiva a ejercer este oficio todos los días para llevarles el sustento.
«Me salieron tres hijos enfermos y yo trabajo para ellos, porque no se pueden valer por sí mismos, no pueden caminar, y con mi trabajo les ayudo y me sustento también, trabajando duramente», comentó Hipólito.
Con el paso de los años ya las familias conocen la historia de este hombre, y ha logrado que las personas lo apoyen al comprarle sus productos, pues, además de que son artesanales y producidos en la zona, son frescos y de calidad.
