Alberto Castillo hizo hasta un zurco de ir y venir en las gradas del estadio Óscar Quiteño. No pudo dirigir desde la cancha en su debut con Águila, debido a que aún le faltan unos documentos apostillados, pero confía en que le llegarán en los próximos días para estar tranquilo y cómodo desde el banco de los migueleños.
Tras el pitazo de Jaime Herrera, árbitro central del juego entre FAS y Águila, este domingo, Castillo se decantó por un festejo discreto, luego de vencer por 0-1 a FAS, en Santa Ana. Además sabía que muy cerca de él había un grupo de hinchas fasistas que le gritaron de todo en su regreso al estadio Óscar Quiteño, que un día fue su casa.
En frío y exactamente desde el marco de la puerta del camerino asignado a Águila, en el Quiteño, el timonel peruano accede a hablar del partido que ganó a Jorge «Zarco» Rodríguez, timonel de FAS y que en una época fue su pupilo.
«Fue un debut soñado. Pero también teníamos de frente a un rival que conoce su campo y que estaba con su público. El gol llegó pronto y eso, de repente, nos permitió defendernos más de lo debido. Pero. al final, yo siempre digo que en los clásicos y finales tienes que ganar», externó el entrenador del equipo naranja y negro.
El estratega peruano reiteró que no es fácil ganar en el Quiteño. Admitió que hubo pasajes de sufrimiento para su equipo ante un FAS que se volcó con todo para intentar rescatar un punto al menos. Los tigrillos tuvieron siete minutos de agregado de parte del árbitro Jaime Herrera, pero no les fue posible el emparejamiento de la pizarra.
«Nosotros contamos ocho minutos en el agregado. Pero esto sigue, hay que olvidar rápido esto y seguir con la humildad necesaria para sumar en casa», dijo el estratega de los emplumados en plática con «Diario El Salvador»