Representantes del área legal de la alcaldía de Santa Ana acudieron a la oficina de la Fiscalía General de la República (FGR) en ese municipio, para presentar una serie de avisos y pedir que se inicie una investigación de posibles delitos por parte de propietarios de establecimientos comerciales que recientemente fueron clausurados temporalmente, como parte de un proceso sancionatorio, por carecer de los permisos municipales para su funcionamiento.
Como parte de dicho proceso, llevado a cabo a través de la Delegación Contravencional y el Cuerpo de Agentes Municipales (CAM), estos negocios, después de agotar las instancias correspondientes, fueron clausurados mientras sus propietarios solventaban su situación con la alcaldía.
A los negocios sancionados los empleados de la alcaldía le colocaron cinta amarilla y un aviso de la clausura en sus respectivos accesos, los cuales fueron violentados por algunos de sus propietarios para volverlos a abrir, haciendo caso omiso de la medida sancionatoria y sin haber arreglado su situación de ilegalidad ante las autoridades municipales, lo que llevó a la alcaldía a interponer los avisos.
De acuerdo con una fuente de la alcaldía, previo al cierre de los negocios sancionados, se había agotado todas las instancias del proceso, entre estas las notificaciones hechas a los propietarios en las que les otorgaban los tiempos establecidos para que legalizaran sus negocios pero no dieron respuesta ni buscaron arreglar su situación.
La fuente agregó que estas acciones hechas por la alcaldía buscan ordenar y regular los negocios los negocios en el municipio.