Cuando Bryan Tamacas marcó su segundo gol en el partido para el 2-1 transitorio ante 11 Deportivo, Milton «Tigana» Meléndez, timonel de Alianza, suspiro y recuperó aire. Se removió hacia abajo su mascarilla, para consumir un sorbo de agua.
Era el tanto que le devolvía la tranquilidad a los paquidermos, esa que perdieron por un momento con el tanto del 0-1 transitorio de Elvin Alvarado.
Ante la falta de un atacante con presencia, Tamacas asumió la responsabilidad de convertir y vaya que lo hizo de inmejorable forma, con dos tantos que suman para poner a los de la capital en semifinales.
Pero faltaba la puntada final, que iba a correr por cuenta de Rodolfo Zelaya, quien estuvo en cancha solo por diez minutos. Al 82′, se encontró un balón cerca del área, para bombearlo y ponerlo lejos de Yonatan Guardado, que estaba salido de su arco.
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Casi de idéntica forma, Zelaya había marcado para los albos en la ida. Con el rodaje adquirido, el atacante albo supo definir. Marcó y luego se tuvo que ir del campo, porque el cuerpo técnico de Alianza quiso cuidar a su joya, para lo que viene, que será más exigente. Diez minutos fueron suficiente para Zelaya.
Cosquillas
El 11 Deportivo se tomó en serio su papel de obligado en la serie que desde el miércoles pasado había quedado 1-2 a favor de Alianza.
Con Gilberto Baires y Fernando Castillo, el equipo de Ahuachapán tuvo dos dinamos para meter en apuros al equipo capitalino, que se había quedado con escaso recurso en ataque con la salida de Oswaldo Blanco y Maximiliano Freitas.
El buen inicio de partido para los fronterizos se vio coronado a los 18 minutos, con un tanto de Elvin Alvarado, quien hizo ver frágil a la zaga blanca, para poner el balón en un rincón del arco de Mario Martínez.
En ese momento, la serie estaba igualada por 2-2 y Alianza tenía que reaccionar para evitar los penaltis.
Alianza se fue con todo su argumento sobre el arco de los visitantes, que se resguardaron ante el ataque de los paquidermos.
Pero el local se tuvo que llenar, antes de todo, de una buena cuota de paciencia, porque el rival se había metido atrás, pero con orden, para cerrarle toda vía de tránsito hasta el arco amarillo.
Los albos pudieron abrirse camino ante la zaga de los ahuachapanecos hasta el 39′,con una jugada magistral, hasta quirúrgica se podría decir, de parte de Juan Carlos Portillo, quien la cedió al espacio a Bryan Tamacas, quien llegó solo a empujar el balón a las redes del arco del adversario.
De esa manera, a los blancos les volvía el alma al cuerpo. Pero seguían con esa timidez en el ataque, sin un delantero con presencia.
Tapa al pomo
En el complemento, 11 Deportivo volvió a tener viñeta de obligado, porque estaba abajo en la pizarra. Pero ahora, la zaga alba estaba más enchufada, a comparación de la primera parte. Sus hombres de marca del medio campo también estaban más atentos.
Sin embargo, los albos volvían a ser escasos en la última linea. Se estaba haciendo casi una obligación que Rodolfo Zelaya pudiera entrar a la cancha para mantener ocupados a los zagueros del adversario.
Pero al 58′, Tamacas, la revelación de los capitalinos en el juego de este domingo, apareció por segunda vez en la pizarra, para poner arriba a los albos por 2-1 y 4-2 en el global.
Alianza tenía la serie resuelta con los tantos de Tamacas y solo debía esperar el pitazo final.Pero faltaba el tercero para coronar. Zelaya, quien solo estuvo diez minutos en cancha, bombeó, al 82′, una pelota ante la salida de Guardado y cerró cuenta favorable a los albos por 3-1 y decir presente en semifinales.