Cuando estamos a un mes de finalizar 2021, la Fuerza Armada de El Salvador por medio de una de sus ramas, la Fuerza Naval, desarrolló una operación exitosa en aguas profundas del océano Pacífico para lograr el mayor decomiso de la administración del presidente Bukele, con 2.7 toneladas de cocaína pura, con un valor de $67.5 millones, a una distancia de 852 kilómetros de la costa de Acajutla, en Sonsonate, en 135 bultos cada uno con 20 paquetes.
Esta se convierte en la segunda incautación en el mar más grande registrada en El Salvador.
Con este decomiso, en 11 meses del presente año, se han decomisado 7.4 toneladas de droga que están valoradas en al menos $165.7 millones, lo que es un incremento comparado con los registros del actual Gobierno y Gabinete de Seguridad en 2019 y 2020. En 2021, la Fuerza Naval ha logrado un mejor desempeño lo que ha permitido impactar al crimen organizado transnacional, el refuerzo financiero, capacitación, adiestramiento y el mando estratégico han logrado que El Salvador sea un referente en el continente y en el mundo, lo cual lo respaldan y destacan organismos especializados como la JIATF-S.
Estas operaciones son ejecutadas por el personal de la Fuerza Naval con buques e interceptores de la Fuerza Armada de El Salvador.
Las operaciones dirigidas desde el Ministerio de la Defensa Nacional tienen un alto compartimentaje y profesionalismo, coordinadas con el jefe de la Fuerza Naval.
Sin ninguna duda, la experiencia del vicealmirante René Francis Merino Monroy como el naval con mayores decomisos en el océano Pacífico en su hoja de vida le proporcionan el liderazgo y ponen en alto a toda la Fuerza Armada de El Salvador.
Ha sido vital el trabajo en equipo del Gabinete de Seguridad Ampliado, la estrecha coordinación entre el MDN, la Fuerza Naval, FGR, PNC, MJSP sigue brindando resultados positivos al país, y también El Salvador por medio de estos importantes decomisos se suma al esfuerzo en el combate al problema mundial de las drogas; la producción, comercialización y consumo de drogas ilícitas se encuentran dentro de los principales problemas que afectan la seguridad global.
Estos decomisos de la Fuerza Naval y todo el sistema del Gabinete de Seguridad Ampliado contribuyen con países ubicados al norte, en especial con Estados Unidos de Norteamérica, principal destino de la cocaína, ya que durante 2020 al menos 93,000 de sus ciudadanos murieron por sobredosis, cifra que supera en un 29 % los 72,000 que murieron en 2019, solo en cuatro estados de la nación americana no aumentaron los fallecidos por sobredosis.
En el último año, más de 275,000 personas en todo el mundo utilizaron drogas, y al menos 36,000 millones sufrieron trastornos por este consumo, de acuerdo con la Unodc.
Por eso, El Salvador, con limitados recursos y gracias a la capacidad, el talento y profesionalismo del personal de nuestras instituciones de seguridad se encuentra en un limitado grupo de países que está al frente del combate del problema mundial de las drogas.
Buen viento, buena mar para todos los navales en El Salvador.