César Funes, exfuncionario del Gobierno de Elías Antonio Saca por el partido ARENA y condenado por corrupción, reveló ayer ante una comisión especial del Congreso que el exgobernante «apoyaba» a los partidos políticos que le daban «correlación» en la Asamblea Legislativa.
«El presidente [Antonio] Saca dijo que él apoyaba a los aliados que le daban correlación en la Asamblea Legislativa. El presidente Saca era bien vertical en ARENA. Él giraba instrucciones. Él ordenaba qué hacer», dijo Funes en su testimonio.
El expresidente de la ANDA y exsecretario nacional de la Juventud en el Gobierno de Saca compareció ayer ante la comisión especial del parlamento que indaga el pago de sobresueldos a exfuncionarios, personas naturales y jurídicas en los últimos seis gobiernos.
«Supe que se pagó a partidos políticos aquí, en la Asamblea. Recuerdo que eran el PDC y el PCN. El secretario general del PDC era [Rodolfo] Párker», detalló Funes.
El exfuncionario de Saca fue consciente de que el haber recibido sobresueldos le acarreó muchos problemas, terminó en la cárcel pagando una pena de cinco años por el delito de lavado de dinero.
Aunque Funes no reveló nombres de exfuncionarios areneros acusados de recibir sobresueldos, dio credibilidad a lo declarado por Saca y su exsecretario privado, Élmer Charlaix, ante los diputados de la misma instancia legislativa.
La comisión también recibió ayer al expresidente de Concultura y exdiputado de ARENA Federico Hernández y al exviceministro de Transporte y exdirector de la Academia Nacional de Seguridad Pública (ANSP) Benjamín Cestoni.
Ambos exfuncionarios de la gestión de Saca han sido señalados de recibir $1,500 y $4,000 en concepto de sobresueldos, respectivamente.
Hernández reconoció que recibió pagos de la Secretaría Privada de la Presidencia por elaborar mensajes para el expresidente Saca, pero no reveló la cantidad de discursos redactados ni mucho menos dio una cifra exacta del dinero recibido por este servicio.
«No recuerdo montos. Recuerdo que en una ocasión fue en efectivo. Yo recuerdo haber llegado [a la Secretaría Privada], me dieron el dinero. Me lo entregó la persona que estaba ahí. Es probable que fuera la secretaria», señaló Hernández.
El exdiputado arenero restó credibilidad a los señalamientos hechos en su contra, además de no reconocer que la firma en los recibos que le fueron mostrados fuera de su puño y letra.
Confesó que cobraba por los mensajes que escribía para el exmandatario, aun siendo presidente de Concultura, lo cual consideró normal. «Eso se me pagó por aparte. Es una cosa muy específica. Es un trabajo muy específico y el presidente lo pagaba. No era en mi trabajo», justificó.
También reconoció que elaboró mensajes para el expresidente de la república Francisco Flores, pero no reveló ante la comisión especial del congreso si cobraba o no por estos.
Cestoni, por su parte, no solo aceptó ante los diputados de la comisión que recibió un complemento mensual al salario que tenía como funcionario, sino que también denunció que esa práctica se empleó en el Gobierno del expresidente arenero Armando Calderón Sol, cuando fue su secretario privado.
«Mi salario era de $3,500. Tenía un complemento de salario de $4,000. El señor Saca me manifestó que había un complemento salarial. Lo entregaba un asistente en la Secretaría Privada. Era legal. Hace cuatro años yo declaré en la Fiscalía», puntualizó tranquilamente Cestoni.
Con voz firme, dijo que la firma del recibo que le fue mostrado por los diputados es la de él. «Yo respondo de mis actos que no les he negado. No he venido aquí a mentir. Nunca dejé de firmar recibos. Esa es mi firma. Ese recibo es el que yo firmaba en Casa Presidencial, 100 % confirmado que es mi firma», sostuvo.
La comisión también añadió otra arista a su trabajo: Cestoni les dijo que la administración Calderón Sol también daba dinero extra a funcionarios.
Según él, el mecanismo de paga era una relación directamente del señor presidente con los funcionarios. «En algunas ocasiones […] estas colaboraciones o las otorgaba él [Calderón Sol] o me encargaba que las entregara. [Quizá] era complemento de salario, en efectivo», dijo.
Agregó que dinero de gastos reservados fue otorgado a alcaldes y a algunos ministerios para el desarrollo de obras. No detalló nombres, cantidades ni partidos políticos de los alcaldes beneficiados.