El ministro de Gobernación, Juan Carlos Bidegain, brindó un balance sobre las emergencias atendidas tras el incidente ocurrido la noche de este sábado en el Estadio Cuscatlán, en donde 12 personas perdieron la vida tras una estampida para ingresar al recinto deportivo durante el partido entre Alianza y FAS.
En primera instancia, el funcionario dijo que «es repudiable que las personas encargadas de estos escenarios no tengan un control estricto. El presidente Nayib Bukele ha ordenado una investigación exhaustiva para que nada quede impune».
En ese sentido, Bidegain señaló que algunos aficionados mostraron que se les vendió boletos falsos, y que aún así se les permitió la entrada:
«Aficionados han mostrado que les vendieron boletos falsos y les permitieron la entrada. Otros hablan de que hubo sobreventa al mercado negro. Como haya sucedido, el presidente Nayib Bukele ha ordenado una investigación exhaustiva para que nada quede impune», expresó Bidegain.
Por su parte, el director de Protección Civil, Luis Alonso Amaya, informó que los cuerpos de socorro han atendido a más de 500 personas. Han tratado desde crisis nerviosas hasta personas que se debaten entre la vida y la muerte.
«Vamos a dejar que las investigaciones sigan su curso, serán las autoridades correspondientes las que determinen científicamente lo que ha sucedido», agregó Amaya durante la conferencia de prensa.
Todos los heridos fueron trasladados a diferentes centros asistenciales con el objetivo de brindarles la atención médica necesaria.
«El presidente Nayib Bukele y su gobierno lamentan profundamente lo sucedido. Nos solidarizamos con las familias. Damos nuestro más sentido pésame (a las familias de las víctimas)», señalaron también las autoridades.
Al menos 12 personas fallecieron la noche de este sábado durante una estampida ocurrida en el estadiu Cuscatlán durante el partido de cuartos de final entre Alianza y FAS.