La efectividad del Plan Anticontrabando que implementa el Ministerio de Hacienda, a través de la Dirección General de Aduanas, ha dejado como resultado el decomiso de 8.5 toneladas de cigarrillos que ingresaron al país de contrabando, cuya evasión de impuesto es de $1.5 millones.
Este miércoles, las autoridades dieron a conocer que este producto será destruido, tal como lo establece la ley y, para lo cual, la Fiscalía General de la República (FGR), es garante de este proceso.
«Como todos sabemos, el contrabando de cigarrillos afecta las finanzas públicas y representa una amenaza grave para la salud pública, ya que evade las regulaciones y controles sanitarios que garantizan la calidad de los productos que ingresan y se comercializan en el país», explicó el ministro de Hacienda, Jerson Posada.
El funcionario agregó que, además, cuando este tipo de productos ingresan al país de forma ilícita pueden contener sustancias nocivas que afectan la salud de miles de salvadoreños.
«Como representantes del gobierno del presidente Nayib Bukele estamos dando un duro golpe a las estructuras que se dedican al contrabando, particularmente, al de cigarrillos ordenando la destrucción de 8.5 toneladas que ingresaron al país evadiendo el pago de impuestos equivalente a $1.5 millones», detalló el titular de Hacienda.
El cargamento incautado fue interceptado por las fuerzas del orden en diferentes operativos efectuados en carreteras, establecimientos y bodegas, por lo que se destacó el trabajo realizado por el personal de Aduana, Fuerza Armada y la Policía Nacional Civil.
El ministro Posada agregó que si bien no existe ninguna prohibición para la comercialización de cigarrillos en el país, este tiene que hacerse bajo los términos legales establecidos en la normativa tributaria y sanitaria.
El cargamento corresponde a paquetes de cigarros de las siguientes marcas: Modern, Gold City, Brass, Genial, Marvel, Royal, Pine Green, entre otras, procedentes del continente asiático.
Por su parte, el director general de Aduanas, Benjamín Mayorga, destacó el trabajo articulado del Gabinete de Seguridad para combatir a las estructuras de contrabando.
«No solo es determinar el impuesto que se ha dejado de percibir por parte del Estado de El Salvador, sino que también, salvaguardar la vida de los salvadoreños porque este tipo de cigarrillos no está bajo control fitosanitario», comentó el director de Aduana.