La ciudad argentina de Buenos Aires, capital del país sudamericano, comenzó a vibrar desde hoy miércoles con una nueva edición del Festival y Mundial de Tango, la correspondiente al año 2024, que comenzó de manera formal con un atractivo y emocionante concierto de apertura.
La ceremonia, que reunió a figuras de distintas generaciones de la música tradicional del Río de la Plata, se llevó a cabo en el Auditorio de la Usina del Arte, un espacio cultural ubicado en la zona sur de la capital.
El Festival y Mundial de Tango se extenderán desde el 14 hasta el 27 de agosto, apuntando a consolidarse como la muestra más imponente y vibrante de música, danza y cultura de Buenos Aires.
La cita de este miércoles contó con una temática especial, la de dar cuenta del cruce generacional que caracteriza al género, uniendo a grandes figuras como el pianista José Colángelo y los bandoneonistas Néstor Marconi y Víctor Lavallén, con jóvenes intérpretes de la Orquesta Escuela de Tango.
Además, el espectáculo contó con la presencia de los músicos Juan Carlos Baglietto y Noelia Moncada y la Orquesta El Arranque, así como una actuación de baile a cargo de la dupla compuesta por Julián Sánchez y Bruna Estellita, la pareja que se coronó campeona el año pasado en la categoría de Tango Escenario, de formato libre y más acrobática, con virtuosas coreografías.
Un teatro edificado sobre las ruinas
Voceros de la organización dijeron a Xinhua que, durante los 14 días, habrá más de 500 actividades en 50 sedes involucradas, y participarán 750 parejas de baile provenientes de 53 países y regiones.
El director del Festival, Gustavo Mozzi, declaró a esta agencia que «el festival reflejará este año el vigor que tiene el tango en nuestros días».
Por su parte, la ministra de Cultura de Buenos Aires, Gabriela Ricardes, se hizo presente en el evento y afirmó que la capital «está de fiesta: empieza Tango BA Festival y Mundial 2024. Inauguramos en la Usina del Arte con un recital increíble y mañana ya arrancamos con la programación fantástica que tenemos».
El tango fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en 2009 por un comité intergubernamental de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), al aceptar una propuesta de Argentina y Uruguay.
El festival culminará el 25 de este mes, con un concierto en el emblemático Teatro Colón, actuación que estará a cargo de la Orquesta del Tango de Buenos Aires, dedicada exclusivamente a la obra de su director, Néstor Marconi.
Dos días después tendrán lugar las finales del Campeonato Mundial de Baile, en el Movistar Arena, un espacio ubicado en el barrio de Villa Crespo, en el centro geográfico de Buenos Aires.
Allí participarán las mejores parejas en dos categorías, «Tango de Pista», que es la versión en la cual la danza respeta el estilo popular y tradicional, y «Tango Escenario».
La exdirectora artística del evento Natacha Poberaj comentó a Xinhua que «el tango es una marca registrada de nuestro país porque nació acá y somos todos tangueros, por lo menos los que estamos trabajando para el festival. Es un amor profundo, sublime y absoluto por el tango».
Poberaj, que este año tiene a su cargo la actividad vinculada a la parte de danzas dentro del festival y la programación del festival en el Centro Cultural San Martín, sostuvo que «el tango sigue creciendo año a año, y la pasión se renueva, porque el abrazo es una necesidad humana y el abrazo es central en el tango».
«El tango es un lenguaje universal, siempre nos da la posibilidad de seguir comunicándonos como seres humanos a través de la danza, de la música, a través de su variada impronta, que se manifiesta en distintas ramas del arte, como el cine, las esculturas o las artes plásticas», agregó la entrevistada.
Una de las novedades para la edición de este año la constituye el «Bondi Tanguero», de la Academia Tango Club, un autobús que recorrerá los barrios capitalinos con propuestas de música y danza al aire libre.
Además, a 130 años de la fundación de la céntrica Avenida de Mayo, el Mirador Plaza de Mayo abrirá sus puertas con un espectáculo inmersivo de tango electrónico, ofreciendo una vista privilegiada de la ciudad.
Como parte de este corredor, la Academia Nacional del Tango se sumará al festival con un ciclo de charlas coordinadas con el Centro de Estudios Tangueros.