El cabecilla de la pandilla 18 de Tonacatepeque, Óscar Eduardo Díaz Recinos, alias «Peluche», enfrentó la vista pública por los delitos de agrupaciones ilícitas y limitación ilegal a la libre circulación.
El terrorista fue detenido el mismo día que el Tribunal Quinto contra el Crimen Organizado de San Salvador inició el juicio en su contra junto a otros cinco pandilleros.
«Siete años pasé huyendo y en el último año del régimen pasé encerrado en mi casa en Tonacatepeque, para no ser detenido, pero al final se dieron cuenta y me fueron a traer», dijo el pandillero al ser consultado sobre su captura.
Díaz Recinos, desconocí por qué delitos lo habían llevado a juicio después de tantos años de huir, pero su abogado, una defensora particular le explicó el caso y le aseguró que no le garantizaba que iba a salir de prisión. «Sus tatuajes son prueba de agrupaciones ilícitas y con el régimen de excepción puede recibir 30 años», le expresó.
En la vista publica la Fiscalía General de la República presentó un testigo con régimen de protección quien afirmó que «Peluche» y los otros cinco pandilleros los amenazaron y obligaron a dejar sus casas.
La declaración de ese testigo no pude ser controvertida por la defensa y el ministerio público solicitó en sus alegatos finales que los seis terroristas sean condenados.
La Policía Nacional Civil (PNC), confirmo que las labores de inteligencia permitieron localizarlo y detenerlo en colonia Las Flores, del municipio de Tonacatepeque.
El terrorista tenía órdenes de captura por los delitos de limitación ilegal a la libre circulación, robo agravado, agrupaciones ilícitas y organizaciones terroristas.