Miembro del grupo General Motors, Cadillac formará parte de la nueva categoría Hypercar, cuyos cinco vehículos alineados en la edición de 2021 (pertenecientes a tres constructores: Toyota, Alpine, Glickenhaus) ocuparon los cinco primeros puestos de la clasificación general el pasado domingo.
El fabricante estadounidense se unirá a otros fabricantes de renombre, como Peugeot, Porsche, Ferrari, Audi y BMW, que ya han anunciado su próximo regreso, en 2022 o 2023. Bentley y Lamborghini también estarían interesados.
El nivel de 2023 ya es muy elevado, con Acura, filial de alto rendimiento de Honda, la escudería Glickenhaus creada por el multimillonario estadounidense del mismo nombre y el equipo ByKolles de Colin Kolles, un antiguo ‘team manager’ de Fórmula 1.
Será la primera participación oficial de Cadillac en Le Mans desde 2002, pero prototipos con los colores de la marca estadounidense de lujo siguieron corriendo en los Estados Unidos, en la serie de resistencia IMSA, contratados por equipos privados.
Ya se han elegido dos para acompañar este programa en la pista, el Chip Ganassi Racing y Action Express, en conexión con Dallara, el fabricante italiano de chasis de carrera. Los coches serán aceptados a ambos lados del ccéano Atlántico e introducidos en la subcategoría LMDh, para ‘Le Mans Daytona híbrido’.