La Cámara Primera de lo Penal de San Salvador, envió a la Policía Nacional Civil (PNC), la orden de captura que emitió el pasado 18 de enero, en contra de Norman Quijano, procesado por los delitos de fraude electoral y agrupaciones ilícitas.
El diputado desaforado del Parlamento Centroamericano y excandidato a la presidencia por el partido ARENA en el año 2014, salió del país el 30 de abril de 2021, según un reporte que la Dirección General de Migración y Extranjería envió a la Fiscalía General de la República y que fue anexado al expediente judicializado en la cámara, el pasado 12 de enero.
Norman Quijano, se ha convertido en un prófugo de la justicia salvadoreña y puede ser capturado en el país, en el exterior solo procedería una difusión roja para que cualquier cuerpo de seguridad lo detenga.
Las autoridades salvadoreñas tienen la opción de tramitar ante la Oficina Central Nacional (OCN) una difusión roja para que la Secretaría General de Interpol, con sede en Lyon, Francia, resuelva si es viable emitir esa alerta con miras a localizarlo y extraditarlo.
La OCN, es la oficina local de la Interpol, todos los países miembros de este organismo cuentan con una sede de estas ya que es el enlace entre las autoridades nacionales y la Policía Internacional.
Quijano, es acusado por el ministerio público de haberse sentado a negociar con los jefes de la Mara Salvatrucha y de las facciones de la pandilla 18, beneficios penitenciarios, más la entrega de $100,000 que se los repartieron entre los tres grupos. La MS recibió $50,000 y los dos bandos de la 18 recibieron $25,000 cada uno.
Ese pacto con las pandillas se dio en el marco de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales del año 2014, comicios que Quijano perdió ante su principal contendiente; el también prófugo, Salvador Sánchez Cerén procesado por delitos de corrupción que cometió en el gobierno de Mauricio Funes, quien tiene siete órdenes de captura; ambos expresidentes asilados en Nicaragua, llegaron al poder bajo la bandera del FMLN.
Norman Quijano, en una reunión que sostuvo con los jefes de las pandillas a inicios de marzo de 2014, en la sede de la iglesia de la red de pastores evangélicos, en la colonia Flor Blanca, pidió a las pandillas que le dieran su voto, de entrada les entregó los $100,000 que les envió a través de Paolo Lüers y les manifestó que de ganar la Presidencia iba a invertir en ellos $100 millones que saldrían del presupuesto general de la nación, que incluso ese dinero ya estaba disponible porque el gobierno saliente de Mauricio Funes, no había ocupado ese monto.