Con una maleta llena de sueños, pero con la mente y el objetivo claro de ser futbolista profesional, el joven delantero becario de la Fundación Educando a un Salvadoreño (FESA), Carlos Ramírez Aldana, viajará este sábado a Ecuador a una prueba en las inferiores del equipo Emelec de primera división.
El futbolista detalló a «Diario El Salvador» que la prueba será por 15 días, pero que su misión pasa por mostrar su talento y prolongar su estadía en territorio ecuatoriano.
«Me feliz y agradecido por esta gran oportunidad que FESA me está brindando. Mi sueño siempre ha sido jugar en el extranjero, siempre he tenido esa visión así que voy con mucha ilusión y con muchas ganas de quedar», dijo el talento juvenil.
«Me voy a probar con las reservas del Emelec. De inicio voy por 15 días, pero eso dependerá de mi desenvolvimiento y del club también, así que como pueden ser 15 días puede ser que ya no regrese. Mi sueño es quedarme y llegar al equipo mayor», agregó.
Carlos se define como un extremo izquierdo veloz, fuerte al momento de encarar en el uno contra uno y de buen disparo a marco. Además, apunta que puede jugar a perfil cambiado y de centro delantero puesto que a sus 18 años mide 1.79 metros de estatura.
El ariete es becario de FESA desde hace nueve años, pero su relación con la pelota la inicio desde sus primeros años de vida según lo afirma él y lo asiste su madre doña Karla Aldana.
«Desde pequeño siempre me ha gustado el fútbol, es el deporte que amo. Empecé desde los cinco años a practicarlo en Funda Madrid y a los nueve años tuve la oportunidad de empezar mi sueño en FESA para formarme profesionalmente», recordó.
«Me quebraba las lámparas, me quebraba los espejos, todo me lo bajaba con la pelota» confiesa su madre, quien está feliz por la oportunidad que se le presenta a Carlos y espera verlo realizado tanto el campo futbolístico como académico.