Durante el segundo día de las audiencias periciales en el caso de la «Masacre del Mozote y lugares aledaños» la perito norteamericana, Terry Lynn Karl, dio a conocer algunas implicaciones de Estados Unidos en la guerra civil en El Salvador, así como la participación de mercenarios estadounidenses en el Batallón Atlacatl.
Según Karl, en esa época había pasado poco tiempo desde la finalización de la guerra en Vietnam y hubo muchos soldados estadounidenses con entrenamiento que tenían la intención de ganarse la vida como mercenarios, no solo en El Salvador, sino en diferentes partes del mundo.
En ediciones de revistas consultadas por Karl, entre ellas «Soldier of forture», la cuál era una publicación sobre mercenarios que se en esa difundía en esa época, encontró «advertencias de muchas necesidades de varios países», aparecieron referencias al batallón Atlacatl, así como una fotografía en las portadas en las que aparecían con el batallón.
«Estaban furiosos por el retiro de Estados Unidos en Vietnam, no creían que Estados Unidos era confiable por eso ellos querían hacer su trabajo contra el comunismo», mencionó Karl.
Asimismo, dijo que en dicha revista se encontró un anuncio en dónde daban a conocer que El Salvador podría considerar la contratación de civiles con amplios antecedentes militares como asesores sin restricciones políticas.
«Esto es completamente ilegal en Estados Unidos, esa gente tenía que hacerlo bajo de la mesa por qué estaba haciendo cosas que iban en contra de la política formal de la administración de Reagan» dijo Karl, sobre la información encontrada.
Karl agregó que dichos mercenarios tuvieron relación con el coronel Guillermo García y El comandante de la Fuerza Aérea, Juan Rafael Bustillo.
Asimismo, Karl menciono que dichos soldados que aún se encontraban vivos y fueron entrevistados por ella misma, manifestaron que los equipamientos eran financiados por la CIA; sin embargo, no hay forma de comprobar el dato.
Según la perito, la ayuda de los Estados Unidos luego de la masacre del Mozote en el 81, se incrementó considerablemente en cuanto a capacitación, armas, equipos de comunicaciones, equipos de fuerza aérea y marina, transporte terrestre y municiones y otros consumibles.
En la revista, también se publicó que hicieron interrogatorio de un «soldado periodista» a un integrante del Frente Farabundo Martí para Liberación Nacional (FMLN). «Es completamente ilegal hacer eso, ellos no debían hacer interrogación con el ejército de El Salvador, en ninguna forma» mencionó la perito.
Según el juez de Instrucción de San Francisco Gotera, Jorge Guzmán, las declaraciones de Karl servirán como un anticipo de prueba en el caso.