El «boom» turístico que experimenta El Salvador ha incrementado considerablemente la demanda habitacional temporal. Los millones de turistas internacionales que ingresan al país año con año buscan espacios para hospedarse, y como ya ha mencionado en otras ocasiones la ministra de Turismo, Morena Valdez, la oferta hotelera aún no da a basto, pese a que hay varios proyectos en ejecución. Por ello, los alojamientos alternativos en plataformas como Airbnb, donde personas arriendan las casas que no ocupan, toman relevancia.
Al respecto, el presidente del Banco Central de Reserva (BCR), Douglas Rodríguez, destacó que el Censo de Población y Vivienda 2024 arrojó que el 47.1 % de las viviendas desocupadas en El Salvador fueron declaradas como de «uso ocasional». Las personas entrevistadas comentaron que muchas de ellas son propiedades de sus familiares que residen en el exterior y otras son alquiladas temporalmente a través de las plataformas de economía colaborativa.
«Alrededor del 50 % de las viviendas desocupadas son de uso ocasional, y son utilizadas por hermanos lejanos que regresan o se alquilan para Airbnb», apuntó.
La ministra Valdez informó que al cierre de septiembre se habían recibido 2.9 millones de visitantes internacionales, lo que dejó $2,600 millones en divisas. Mucho de ese capital que dejaron los turistas quedó en las manos de los empresarios hoteleros y los salvadoreños que arriendan sus espacios.
Al concluir el año, se proyecta un movimiento de 4 millones de visitantes internacionales y más de $4,000 millones en divisas, cifras récord que potenciarán la economía local.
Más de la mitad de estructuras en el país son viviendas
De acuerdo con el censo, alrededor del 60 % de las estructuras totales en el país son viviendas, y estas se concentran en su mayoría en los departamentos de San Salvador (24.3 %) y La Libertad (12.5 %), lo cual hace sentido teniendo en cuenta que dichos territorios concentran la mayor actividad económica y social.
En este contexto, es importante mencionar que actualmente existen 2,270,170 viviendas, un importante incremento versus las 1,668,511 que se contabilizaron en el censo de 2007.
Entre los datos que arrojó el estudio también destaca el hecho de que hay más viviendas ocupadas en el territorio. Los resultados indican que hay 1,841,206 inmuebles ocupados actualmente, mientras que en 2007 había 1,372,853.
Por otro lado, más de la mitad de la población (57.9 %) encuestada declaró que reside en su propiedad totalmente pagada, un 8.8 % se encuentra en proceso de cancelar el inmueble y solo un 15.2 % alquila.