En la actualidad, El Salvador es la nación centroamericana que posee los precios de los productos alimenticios más bajos con una tasa inflacionaria en este sector del 1.21 %, mientras que la medición general se situó en 0.58 %, ambas con datos del Banco Central de Reserva (BCR) hasta septiembre pasado.
Al respecto, el presidente de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar, afirmó que estas mediciones que se materializan en los precios que paga el consumidor final, son el resultado de las medidas ejecutadas en el marco de la fase 1 del plan económico del presidente Nayib Bukele en su segundo mandato: la alimentación.
«La alimentación es un eje principal del plan económico, es la fase 1, y ya se han emitido una serie de medidas que son importantes para garantizar el abastecimiento de productos y buscar la estabilidad de los precios y sobre todo un precio que sea accesible para nuestra población», dijo el funcionario en una entrevista televisiva.
En este sentido destacó la reciente inauguración de la Central de Abastos de Soyapango, la implementación de los agromercados, y la exoneración de los impuestos de importación para 110 productos entre alimentos e insumos agrícolas durante 10 años.
Respecto a la central de abastos, mencionó que esta es «una respuesta categórica que el abastecimiento de los productores se pueda acercar a los consumidores, y todo productor sabe la importancia de tener acceso al mercado».
A su vez, señaló que esta medida nace bajo el compromiso del 75 % del abasto de este centro mayorista provenga de productores nacionales, mientras que el restante 25 % se obtiene de las importaciones.
«La central de abastos viene a ser una alternativa importante a otras que han estado históricamente en nuestro país, como es el mercado La Tiendona, que es un mercado mayorista, también el Mercado Central, que en ciertos productos también es mayorista», añadió.
El funcionario reiteró que los beneficios de estas medidas ya impactan el mercado, y que la con la inauguración de la central de abastos se multiplicaran, en la medida que abarque a toda la cadena de suministros de alimentos: restaurantes, comedores y distribuidores del interior del país.