«Abran ya, queremos votar, ya se pasaron de la hora y esto no es justo. Uno madruga a votar para que le digan que no van a abrir hasta más tarde», manifiesta desde su silla de ruedas Bertila Zelaya de Reyes, de 82 años, afuera del Complejo Educativo Capitán General Gerardo Barrios, centro de votación que lleva una hora de retraso.
Al igual que Bertila, más de 400 personas aguardan afuera del segundo centro de votación más grande de la ciudad Morena en espera que los delegados de la Junta Electoral Municipal den el aval para que inicien las votaciones.
Bertila dice que tuvo que madrugar para ser de las primeras en emitir el sufragio, sin embargo, lamenta que su esfuerzo no valió la pena. Agrega que atendió a la invitación que el Tribunal Supremo Electoral dijo respecto a que los de la tercera edad votarían primero.
«Todo esto es una mentira que íbamos a votar a las 7:00 de la mañana, a mí se me complica más por andar en silla de ruedas. Madrugué de por gusto y así un montón de gente que viene temprano porque tiene otros quehaceres»,dijo Bertila.
Rita de Ramírez, de 70 años, también lamenta el atraso y desconfía que sea una estrategia para que las personas se desesperen y no voten. «Tienen miedo esos partidos corruptos y nos quieren desesperar para que no votemos, pero no lo van a logar. Yo con mi problema de rodillas, pero voy a esperar un poco más», dice de Ramírez.
El referido centro de votación tiene 18 JRVs y 12,050 santanecos están habilitados para elegir un nuevo concejo municipal y a siete diputados para la Asamblea Legislativa.
La representante de la Junta Electoral Municipal, Karla de Castillo, explicó que el retraso se debe a que no podían completar las JRVS por falta de personal. «No había suficientes elementos para integrar las mesas y la ley nos dicen que se deben integrar con tres como mínimo y en la mayoría de meses solo había dos y tuvimos que ver como las integraban», señaló.
El disgusto de los electores fue tanto que comenzaron a golpear el portón del centro educativo, otros optaron por volver a sus casas pues aseguran que tienen enfermedades y el ambiente tenso les perjudica para su salud.