El Centro Internacional del Cáncer del Hospital de Diagnóstico ha innovado en el tratamiento paliativo del dolor a través de la radioneuromodulación con un bisturí de rayos gamma, una técnica moderna de radiación que permite intervenir áreas del cerebro para brindar alivio a dolores producidos por neuralgia del trigémino y dolores intratables producidos por diferentes tipos de cáncer.
A lo largo del tiempo, la institución había abordado bajo esta técnica tumores, malformaciones arteriovenosas y, actualmente, se utiliza para brindar una alternativa al dolor. A la fecha, más de 42 pacientes han recibido este tipo de terapias con éxito.
«La mayoría de los pacientes experimentan una mejoría de más del 50 % antes de las 72 horas, y eso es lo que verdaderamente es la parte útil. Esta máquina es la única que hay en el país y en Centroamérica, no hay otra igual, ni tan siquiera parecida, salvo en Costa Rica que es un robot», explicó el doctor Eduardo Lovo, neurocirujano y director del centro.
El doctor Lovo destacó que la investigación ejecutada respecto al uso de esta técnica para tratar el dolor pone al país a la vanguardia en estudios médicos, cuyos resultados serán expuestos en diferentes eventos a escala mundial para dar a conocer los avances en la medicina aplicando radioneuromodulación.
«El Salvador, con esta investigación, es el primer país que pone la primera serie clínica con efecto de radioneuromodulación. Eso ahora hay que presentarlo en el Mundial de Radiocirugía en Colombia y Milán, porque es realmente lo que estamos buscando», señaló el director del Centro Internacional del Cáncer.
De igual manera, a través de la radioneuromodulación se prevé continuar investigando las aplicaciones que esta tiene para tratar adicciones y otras afecciones que involucren la función cerebral, de manera que se pueda ofrecer a los pacientes nuevas alternativas a las ya tradicionalmente establecidas y que, de alguna manera, no han tenido el éxito previsto.
«Se puede modular ciertas áreas del cerebro, en este caso, estamos modulando el dolor, pero en el futuro y hacia donde van muchas investigaciones, va para modular adicciones, por ejemplo: obesidad mórbida, depresión, ansiedad, epilepsia. Muchos de los retos inmensos no solo la neurología ni neurocirugía, sino que cuando hablamos de dolor y adicciones hablamos de una población inmensa», agregó el doctor Lovo.
En siete años, el Centro Internacional del Cáncer ha trabajado en el área funcional para aplicar esta técnica para beneficiar a las pacientes.
«Sabíamos por la literatura y por todo lo que nos hemos respaldado, que es un tratamiento aparentemente 100 % seguro. Eso en la medicina es difícil decir, hasta tomarse una aspirina puede tener complicaciones, pero no hemos visto ninguna complicación, y ahora menos, porque las dosis que entregamos son menores», dijo Lovo.
Para mayor información puede llamar a los teléfonos: 2506-2001 / 7737 9416, o visitar las instalaciones del Centro Internacional del Cáncer ubicado en la 3a Calle Poniente Block No 122, San Salvador, en la primera planta del parqueo anexo del Hospital de Diagnóstico.
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