El Gobierno de Chile decretó un toque de queda en tres localidades de la provincia de Arauco, tras el asesinato el fin de semana de tres carabineros.
El presidente Gabriel Boric comunicó la medida en sus redes sociales después de deliberar con altos mandos de las fuerzas de Seguridad y Defensa del país sudamericano.
La decisión busca apoyar las labores investigativas y garantizar el orden público en la región, tras el asesinato de los tres policías.
La restricción, que abarca las comunas de Cañete, Contulmo y Tirúa, rige desde las 00:00 hasta las 7 horas. Adicionalmente, «se intensificará la vigilancia policial y militar en el área con patrullajes combinados para maximizar la capacidad de respuesta ante cualquier contingencia».
«Los criminales responderán ante Chile y la justicia», agregó Boric.
Boric previamente apeló a la unidad en medio de la conmoción por el asesinato de los policías y dijo que, para enfrentar esta situación, «no tienen que haber ni izquierdas ni derechas, ni oficialismo ni oposición».
