China tiene actualmente dos grandes Bolsas de valores, Shanghái y Shenzhen.
Xi afirmó, en una declaración en el marco de un salón comercial, que la nueva bolsa apoyará el desarrollo de las pequeñas y medias empresas, aunque no ofreció más detalles.
«Vamos a seguir apoyando el desarrollo innovador de pequeñas y medianas empresas […] mediante el establecimiento de una bolsa de valores en Pekín», dijo.
Este anuncio se produce en un contexto de endurecimiento por parte de las autoridades de las normas en varios sectores clave en China, desde el entretenimiento a las tecnologías.
China ha lanzado duras medidas restrictivas contra algunas de sus grandes firmas de comercio electrónico, como Alibaba.
Las bolsas de Shanghái y Shenzhen están sometidas a limitaciones en las variaciones de las cotizaciones del 10% para contener la volatilidad de las acciones.