La tasa de incidencia de COVID-19 en siete días en Alemania también se incrementó, alcanzando 1,388,5 contagios por cada 100,000 habitantes hoy, superior a los 1,319 del día anterior, dijo el RKI.
Debido a la menor severidad de los casos asociados con la variante Ómicron, los gobiernos federal y estatal de Alemania acordaron relajar sucesivamente la mayoría de las medidas contra la COVID-19 para el 20 de marzo. Sin embargo, las medidas de protección básica como el uso de mascarilla en ciertas áreas se mantendrán en vigor.
Desde finales de la semana pasada, los restaurantes y hoteles en Alemania ya no tienen restricciones para recibir sólo a clientes vacunados o recientemente recuperados de la enfermedad. Bajo la llamada norma 3G, esos lugares ahora estarán abiertos también para personas no vacunadas que entreguen resultados negativos de su prueba de COVID-19.
Con apenas 95,000 vacunas administradas el miércoles, la campaña de vacunación en Alemania continúa desacelerándose. De acuerdo con cifras oficiales, al menos 47,9 millones de personas han recibido una dosis de refuerzo, mientras que 19,6 millones de personas no están vacunadas.