Costa Rica llegó a los 500 homicidios en lo que va del año, una cifra que supera los 355 reportados en el mismo período en 2022, con una diferencia de 145 asesinatos más, de acuerdo con datos del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Las autoridades señalan que ocurre un homicidio cada 10 horas en el país, pese haber lanzado en abril un ambicioso plan de seguridad para combatir la criminalidad y la delincuencia en el territorio centroamericano.
Las estadísticas de la OIJ detallan que 314 crímenes se cometieron con motivo de ajuste de cuentas o venganza, otros 78 se dieron en discusiones y riña, 34 fueron por comisión de otro delito, mientras que 22 asesinatos se designaron en la categoría de «otro o indeterminado».
Este año ha habido cuatro feminicidios y otros cuatro delitos fueron clasificados en «repeliendo actividad criminal», publicó la OIJ.
Las provincias donde más homicidios han ocurrido son San José (125), Limón (118), Puntarenas (72), Alajuela (59) y Guanacaste (50). Cartago (33) y Heredia (29) son las provincias con menos registros de este delito en el que arrebatan la vida de las víctimas.
El ministro de Seguridad, Mario Zamora, se reunió esta semana con empresarios de la comunidad en Nosara y Sámara, de la provincia de Guanacaste, ante los recientes hechos violentos y por el aumento de personas ligadas al narcotráfico que se movilizan en la zona.
«Es la tercera reunión que tenemos con las comunidades de Nosara. Existe preocupación por parte del Ministerio de Seguridad ante lo que acontece esta región. Nos parece que la respuesta policial debe adecuarse a mucha de la información que nos suministra la ciudadanía», aseguró el funcionario, quien prometió otra reunión dentro de un mes para definir un plan de seguridad.
«Sabemos que tenemos un gran problema, una amenaza criminal del narcotráfico que está robando la paz y la seguridad de esta región», afirmó.
«Vamos a trabajar en el corredor del Pacífico de Guanacaste, porque tenemos una gran lucha frente a la criminalidad», dijo por medio de videos publicados en Seguridad.
El presidente Rodrigo Chaves fue cuestionado desde inicios del año por no implementar un plan de seguridad que se asemeje al promovido por el presidente Nayib Bukele en El Salvador, con el régimen de excepción y el Plan Control Territorial, cuando los índices de criminalidad superan los del año anterior.
Ante la presión, el presidente costarricense anunció en abril estrategias de seguridad con reformas legales y anunció que se triplicaría hasta 9,500 los policías disponibles para patrullar en las zonas más peligrosas. Sin embargo, pese a las acciones lanzadas hace tres meses por el Ejecutivo, la delincuencia continúa afectando a la población.