El Ministerio de Educación Pública (MEP) de Costa Rica anunció ayer que interrumpirá una vez más las clases debido al alza de casos de la COVID-19 en el país, los cuales han rebasado en dos ocasiones el umbral de los 3,000 positivos diarios.
La ministra de Educación, Guiselle Cruz, dio ayer la noticia y agregó que el Ejecutivo impondrá hoy mismo más medidas para contener la curva de casos que, desde hace un mes, se ha elevado de forma acelerada.
Esto ocurre cuando el país está desde hace un par de semanas con restricciones de aforo en comercios y de circulación vehicular ordenada por terminación de placas.
La suspensión del curso lectivo será entre el 24 de mayo y el 12 de julio, detalló el MEP en un comunicado. Así, se tomará una pausa en las aulas desde el 24 de mayo hasta el 25 de junio y se añadirán dos semanas más que corresponden a las vacaciones de medio año.
Las clases se habían reanudado a inicios de febrero, luego de 11 meses de pausa por la pandemia de la COVID19. Los estudiantes estaban ordenados por modalidad semipresencial, algunos en aulas y otros siempre por medio de clases virtuales. La interrupción se ha coordinado con el Ministerio de Salud, con el cual se acordó «la conveniencia de limitar la movilidad en todo el país», detalló en un comunicado.
«Ante la situación del país en el aumento de contagios y como una medida que viene a acompañar otras que informará el Gobierno, hemos decidido, después de mucho análisis, hacer una reorganización del curso lectivo 2021»,
ministra de Educación, Guiselle Cruz.
No habrá aulas virtuales por falta de conectividad
Para tratar de no incidir de forma negativa en la educación pública, el año lectivo actual será extendido hasta la tercera semana de enero de 2022. Además, el MEP detalló que se debería aprovechar esta pausa para avanzar en el proceso de vacunación de los docentes.
De igual forma, se aclaró que las lecciones no seguirán en aulas virtuales porque más de 400,000 integrantes de la población estudiantil no tienen acceso a conectividad. «Una situación inédita requiere medidas inéditas», recalcó la ministra Cruz.
En Costa Rica se han acumulado más de 285,000 casos positivos de la COVID-19 desde marzo de 2020. Además, otras 3,547 personas han fallecido a causa del virus. La tasa de mortalidad en el país es del 1.3 %, de acuerdo con los datos del Ministerio de Salud.