La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha detectado once variantes de SARS-CoV-2, es decir, lo que conocemos como la COVID-19. Estas variantes han sido divididas en dos grupos o tipos: de preocupación o de interés.
En el primer caso, de preocupación (VOC, por sus siglas en inglés), se les asocia uno o más cambios en tanto que afecten de forma significativa a la salud pública. Estos cambios son: aumento de transmisibilidad, aumento de la virulencia, es decir, la capacidad del virus de causar daño. Y también hay disminución de la efectividad de las medidas sociales y de salud pública o de los medios de diagnóstico, las vacunas y los tratamientos disponibles.
Para el caso, están identificadas las variantes vistas en el Reino Unido, India, Brasil y Sudáfrica.
Las variantes de segundo tipo, las de interés (VOI, por sus siglas en inglés), se consideran así cuando su genoma presenta mutación en comparación al virus de referencia, pero también cuando esta se ha identificado en varios países y como causa de transmisión comunitaria. Entre estas, está la variante Lambda encontrada por primera vez en agosto de 2020, en Perú.
Cada nueva variante o mutación, desde luego genera ansiedad para el virus más mortal en la actualidad. Por eso es importante informarse. Lo primero que vale la pena aclarar es qué son estas variantes y cómo aparecen.
Un virus, este u otro, entre más se propaga más posibilidades tiene de mutar.
En el caso de la COVID-19 ya se han registrado miles de pequeñas mutaciones, pero la gran mayoría de ellas con minúsculas consecuencias.
Estas mutaciones, en algunos casos, traen consigo a nuevas variantes. Esto ocasionalmente es una manera que busca el virus de sobrevivir y seguir reproduciéndose.
Siguiendo a la fuente de información que poco a poco está registrando y validando todo lo nuevo sobre este virus, es decir, la OMS, hay cuatro variantes que son de preocupación o VOC.
Estas variantes han registrado un cambio en la proteína espiga que es la que ayuda al virus a entrar en la célula en el cuerpo. Las variantes son diferentes, aunque de manera leve.
VARIANTES DE PREOCUPACIÓN (VOC)

Las cuatro variantes de preocupación, a su vez, han registrado mutaciones. Así, la mutación denominada N501Y está en la variante Sudáfrica, Brasil y Reino Unido. Esta mutación puede afectar en que se propague más fácil.
Otra mutación es la E484K observada en las mismas variantes, pero que puede incidir en la respuesta de los anticuerpos producida por nuestro cuerpo.
¿Qué pasa con las vacunas? A medida se están conociendo las variantes y las mutaciones, las vacunas se pueden ir modificando, otras tienen cobertura de estas variantes, que como ya se dijo pueden tener mínimas diferencias.
VARIANTES DE INTERÉS (VOI)

En El Salvador, el ministro de Salud, Francisco Alabí, ha dicho que continúan con investigaciones pero que por el momento no se ha detectado la variante de California, Estados Unidos, mientras que Guatemala sí la han descubierto. La ministra de Salud de Guatemala, Amelia Flores, también ha declarado que han localizado la presencia de la variante Gamma, de Brasil.
Aún hay mucho por aprender de este virus, lo importante es seguir aplicando las medidas de bioseguridad.