Jurassic Park marcó toda una generación no solo en la cultura popular, sino también para la industria del cine al revolucionar la técnica de los efectos especiales a como los conocemos hoy en día.
Eso le valió a la primera película, estrenada en 1993, ganar tres premios de la Academia; entre ellos, la mejor mezcla de sonido, al darnos los temidos rugidos y graznidos de los amados y a la vez temidos dinosaurios.
Casi 30 años han pasado y ahora estrena su sexta y última película, con la que la segunda trilogía cierra el arco argumental iniciado en 2015, con un parque de atracciones totalmente funcional y que correría el mismo destino que el del filme original.
A diferencia del primero, ahora las criaturas prehistóricas dominan todas las ciudades a raíz de lo ocurrido en «Jurassic World: el reino caído» (2018).
Esta nueva aventura parte cuatro años después de los incidentes en la mansión Lockwood y los dinosaurios se enfrentarán a coexistir con los seres humanos. La entrega marca también el regreso de los doctores protagonistas de la primera trilogía: Alan Grant (Sam Neill), Ellie Sattler (Laura Dern) e Ian Malcolm (Jeff Goldblum), quienes deberán unir fuerzas para descubrir los oscuros secretos que encierra la empresa de ingeniería genética Biosyn.