Dariel Meléndez Dávila, es un joven surfista (20 años) de origen costarricense, que ha captó las miradas y atención de todos los presentes en el evento Surf City El Salvador Alas Tour 2020, no porque haya sido el ganador del torneo, sino porque pese a su condición de incapacidad física que posee, dio muestras claras que este deporte le apasiona y es capaz de dominar las olas, tal como lo hacen los profesionales.
Dariel cuenta que es originario de la ciudad costera de Puerto Viejo, en Puerto Limón, en la zona atlántica de Costa Rica y que es la primera vez que sale de su país. Está maravillado con la calidez de la gente salvadoreña y la belleza de la playa El Tunco.
«Llegué acá invitado por un amigo que vino a trabajar con la organización de este evento y la verdad es que me han tratado muy bien, este amigo sabe que me gusta el surf y tuvo a bien traerme a El Salvador», dijo Dariel, quien a causa de un accidente de tren perdió su pierna izquierda a temprana edad, pero eso no le impide superarse y ahora practica el surf adaptado.
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Meléndez agregó que se encuentra en El Salvador junto al equipo de surfistas que ha representado a su amada Costa Rica en este evento internacional. Como un apasionado del mar y las olas, el deseo de desafiar las de la playa El Tunco le invitaron a lanzarse al agua y demostrar sus habilidades.
Fue así como captó la atención de muchos surfers y periodistas que de inmediato le hicieron varias entrevistas, luego de haber mostrado que puede maniobrar sobre las olas y que el no contar con una de sus piernas, no es impedimento para practicar este deporte.
«Un amigo que hace surf me motivó a practicarlo, en ese entonces no tenía deseos de nada, pero finalmente me decidí y me dí cuenta que hay todo un mundo de oportunidades que se pueden aprovechar. Desde hace dos años practico surf adaptado en mi país y ahora sé que a través de este deporte puedo tener opción a asistir a eventos regionales y mundiales representando a mi país», comentó muy emocionado.
«Antes nunca lo había hecho, entonces fue todo un reto, y comencé a hablar con un amigo y él me comentó que venía llegando de un campamento de surf adaptado, de surf terapia y que habían trabajado con personas con discapacidad, entonces eso fue mi motivación», explicó el tico.
Mundo de oportunidades
Dariel asegura que todo eso lo llevó a investigar qué era el deporte del surf adaptado y se dio cuenta que era un mundo lleno de retos, competencias, mundiales y encontró que era un deporte que se podía adaptar a su condición y es así como ha decidido entrarle de lleno y ahora su aspiración principal es ganarse el derecho a representar a Costa Rica en eventos internacionales.
El tico afirmó que al tener casi dos años de practicar esta modalidad ingresó al Circuito Nacional de Surf Adaptado de Costa Rica, en donde terminó obteniendo el tercer lugar del ranking nacional y entró a la selección nacional de su país.
«Lo más difícil para mi fue agarrar condición, antes no hacía nada y, de pronto, debía hacerlo todos los días, entonces el cuerpo te demanda, aparte que cualquiera que practique surf sabe que no es algo fácil y sencillo, requiere esfuerzo, tomas una ola baja y vuelves contra todas las olas», explicó el surfer paralímpico.
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A pesar de haber pasado por momentos difíciles a lo largo de sus 20 años, Dariel demuestra que nada es imposible y que tiene mucho que dar aún y más en el surf adaptado que en su país va en ascenso.
Dariel expresó que le encanta ver a las personas felices y que ha aprendido, a su corta edad, a valorar y apreciar lo poco o mucho que tiene, así como todo lo que el mar hasta hoy le ha dado, que piensa llegar lejos y volver un día a El Salvador en calidad de atleta paralímpico, así como volver a degustar las pupusas que tanto le han cautivado.
