Las estadísticas periodísticas le acreditan no más de 240 goles en todo su historial. Esos datos le ponen por debajo del hondureño Williams Reyes que es el goleador histórico del país con 294 dianas, y del panameño Nicolás Muñoz que lleva 291, pero David Cabrera, histórico goleador de FAS, da poca credibilidad a esas estadísticas. No a las de Reyes y Nico sino a las suyas, porque según él tiene revistas de antaño donde le contabilizan más de 340 goles en torneos solo locales.
El mundialista de México 70, aunque cree que los números que él maneja son los originales, afirma que no se afanará por demostrarlo, igual le despreocupa, que sea Reyes o Nico el dueño del récord, pero reconoce que le da tristeza que no haya un salvadoreño de esta época en esa nómina.
Desde los Ángeles el ex ariete se tomó unos minutos para hablar con Diario El Salvador sobre de la decadencia de «9» en el país, el bajo nivel que de nuestro fútbol y la poca probabilidad que tiene la selección de asistir al Mundial en Catar.
Recién ha terminado la segunda fase del Apertura 2020 y el campeón de goleo de nueva cuenta es un extranjero ¿qué está pasando con los goleadores salvadoreños?
Bueno mire hay varios factores. Uno de los factores es que al goleador que es el que termina la jugada hay que hacerlo, hay que prepararlos para que tengan esa vocación de gol porque nadie nace aprendido, y creo que en El Salvador por eso se está sufriendo tanto con los goleadores nacionales porque no se preparan. Yo recuerdo que en mi época a nosotros nos preparaban los diferentes entrenadores que había. Le voy a hablar de mi caso. Yo no podía pegarle con la izquierda muy bien, yo no podía cabecear muy bien. Y los diferentes entrenadores que tuve me decían: te quedas conmigo después del entreno, vamos a patear con la izquierda desde fuera de área, con la derecha en movimiento, te vamos a hacer centros para que cabecees, así yo me quedaba una hora o más después de los entrenos. Entonces yo tuve la suerte de tener entrenadores que se preocupaban por el goleador, querían hacerme goleador y yo creo que en los diferentes equipos era lo mismo. Hoy yo creo que a los jugadores no los trabajan para que sean goleadores. No los trabajan y parte de culpa es de los entrenadores que ya quieren a los jugadores ya hechos.

¿Tiene culpa el cuerpo técnico?
Sí, esa es la parte de culpa del cuerpo técnico, y la parte de culpa del jugador, me refiero al número 9, es que sabiendo que es el jugador donde se finaliza la jugada no se prepara para ser el goleador o un líder de goleo individual. No tiene ese entusiasmo de querer figurar como goleador. Yo creo que al jugador le falta un poco de motivación porque no se preocupa por su rendimiento personal y de ahí vienen los problemas que las juntas directivas de los equipos como tienen escases de jugadores empiezan a buscar fuera del país. Y si usted mira la gran cantidad de extranjeros que vienen, vienen para ser delanteros porque hay carencia de goles a escala nacional, y por eso se ha dado la situación que en los últimos años la gran cantidad de goleadores en los torneos cortos han sido siempre extranjeros. Eso debería servirle de preocupación al jugador nacional para que el fútbol mejore. Yo creo que en todos los puestos hay que tener ese deseo de superación. Esas son las causas que yo miro como la escases de goleadores salvadoreños: la falta de preparación del jugador que no tiene deseos de superación y segundo que los entrenadores ya quieren al jugador hecho.
¿Se falla en la enseñanza y falta de ambición del futbolista?
Eso. Usted dijo las palabras exactas. Fíjese que lamentable el fútbol nuestro, hay muchísimos jugadores, y el jugador en la liga mayor va a aprender a jugar fútbol, y en otras ligas del fútbol desarrollado cuando el jugador llega a la liga mayor, llega con al minimo 10 años de aprendizaje. En nuestro medio, el jugador si no es en la liga de ascenso o en la liga mayor que aprende, no aprende desde antes.
¿Será que le sale más fácil y barato al dirigente traer jugadores extranjeros que preparar un delantero nacional?
A los directivos les sale más fácil. Y le voy a mencionar el ejemplo de FAS que es el equipo donde yo jugué. Si FAS necesita un centro delantero ahorita que es lo que hará: ver donde se consigue en Suramérica un goleador, le va salir más o menos relativamente barato y se supone «que ya viene hecho». Eso le sale más fácil al directivo que hacer jugadores desde las canteras porque ese es un proceso a largo plazo. Si los equipos de la liga mayor empezaran a trabajar a jóvenes de 8 o 10 años, cuando ese joven llegue a 18 años va a poderle pegar con la izquierda, con la derecha y cabecear. Va llegar técnicamente pulido, lo único que le va a faltar es adaptarse a un sistema de juego. Desgraciadamente no hay esas canteras porque eso repercute en el dinero.
Había más escuela en su tiempo…
Claro y había como le repito los técnicos enseñaban. Raúl Miralles, que es quien me puso el ojo y me invitó a FAS, se quedaba conmigo haciéndome centros desde la izquierda desde la derecha y yo terminaba cansado de tanto tirar al marco, hasta con dolor de cabeza de tanto cabeceo. Él me fue puliendo ya estando en la liga mayor. Él se preocupó por quitarme defectos y enseñarme virtudes y así fue como yo jugué 20 años en FAS gracias a la base que él me dio. Hoy lo que sucede también es que los jugadores están deseando termine el entreno para irse a sus casas. Esa es falta de profesionalismo, falta de deseos de superación de un jugador.
El ámbito periodístico le atribuye 240 goles, el récord histórico lo tiene un hondureño, Williams Reyes y quien está a punto de quebrarlo es un panameño, Nicolás Muñoz ¿no le da tristeza que no sea un salvadoreño el que esté ahí?
La cantidad de goles no me preocupa. Ahora bonito y lindo hubiera sido que un nacional estuviera en esa nómina. La cantidad de goles no me preocupa que sea extranjero o que sea nacional, si lamento profundamente que no hay un nacional en esa nómina con esas cantidades de goles. Volviendo al tema, es lamentable que en nuestro medio no surjan números 9, habiendo más material deportivo, más material humano porque hoy El Salvador tiene muchos más habitantes de la época cuando yo jugaba. Pero como le digo no les gusta trabajar, los entrenadores y los directivos ya quieren hechos los jugadores y los jugadores no tienen el deseo de superación. En cualquier puesto que jueguen no tienen ese deseo de superarse y quieren ganar bien. Yo no me opongo a que un jugador quiera ganar bien, que ganen lo que quiera y que si es posible sea el mejor pagado del equipo, pero que lo demuestre en la cancha. A mí me gusta que el jugador gane bien, pero que lo demuestre en la cancha. Desgraciadamente hay jugadores que quieren cobrar como profesionales y actúan como amateur.

¿Está pendiente del fútbol nacional?
Nosotros vemos el fútbol salvadoreño, aquí lo dan todos los fines de semana y cuando juega FAS yo lo veo, pero sinceramente da tristeza. A mí me da tristeza sinceramente la decadencia de goles, jugadores que pierden pelotas infantiles. No veo calidad en el fútbol salvadoreño y todo eso se refleja en la selección nacional.
Don David acá recién han reconfirmado al profesor Carlos De los Cobos como técnico de la Selección Nacional, se ha ido dos veces a un mundial y está apunto de iniciar otro sueño ¿Cómo ve el panorama para El Salvador de cara a Catar 2022?
Yo le soy sincero, no quiero ilusionarme ni poner palabras que sean falsas. Yo estoy convencido en un 90 % de que El Salvador no va a Catar, El Salvador no clasifica. Esa es mi opinión y puedo estar equivocado, pero El Salvador con esa calidad de fútbol que tiene ahorita no clasifica para Catar, a no ser que suceda algo extraordinario. Yo no lo digo por el técnico porque no lo conozco, lo digo por el nivel futbolístico que hay en El Salvador, hay una calidad muy baja.
Usted asistió al Mundial de México 1970, es goleador histórico de FAS y en esa Copa del Mundo entiendo no vio minutos, imagino había pesos pesados en el frente de ataque…
Para que usted tenga una idea. Fíjese que en 1970 que fue el mundial había para centros delantero Sergio Méndez, Mon Martínez y David Cabrera. Éramos los tres centros delanteros. Yo con 19 años era el más jovencito, ya Mon venía en sus últimas. Mon jugaba en Águila y fue campeón goleador por muchos años, Sergio Méndez jugó solo en Atlético Marte y él era el líder goleador de su equipo y yo era el líder goleador en FAS. Sin embargo, por ser el más jovencito fue banca. A don Hernán Carrasco, con justa razón, le parecía Mon y Sergio Méndez por su mayor experiencia.

¿Cuál es el futuro que usted le ve al fútbol salvadoreño y concretamente la Selección Nacional?
Viviendo el espectáculo que estamos viendo no le veo mucho futuro a esto. Esto hay que cambiarlo, pero como que le damos vuelta a una tortilla en un comal. Darle vuelta totalmente y cuando yo le digo darle vuelta totalmente me refiero a todos los niveles que administran y manejan el fútbol salvadoreño. Empezando por el dirigente federativo, que llegue gente que realmente quiera colaborar con el fútbol, que se lleven entrenadores que verdaderamente vayan a enseñar a los jugadores… si 10 equipos de la liga mayor mantuvieran tres categorías yo le aseguro que el futbolista se prepara mejor y el fútbol cambia. Hoy los directivos de la liga mayor se enfocan en futbolistas de la liga mayor, pero no se ponen a pensar que actúan para el presente y no hay planificación a futuro.
¿Será imposible ver a El Salvador en un tercer mundial de fútbol?
No, pero habría que darle vuelta a la tortilla como le dije. Habría que cambiar muchísimas cosas desde arriba hasta abajo. De este mundial de Catar que El Salvador se olvide, El Salvador no va al mundial.