Este 14 de junio se conmemora el Día Mundial del Donante de Sangre para incentivar y concienciar a la población mundial acerca de la importancia de donar sangre para salvar la vida de los pacientes que necesitan de transfusiones, según «Día Internacional de».
Este día para conmemorar a los donantes de sangre, y también, para agradecerles por esta filantrópica labor que salva vidas, a pesar de su gran relevancia, cuenta con un origen que pocas personas conoce.
El origen del Día Mundial del Donante de Sangre posee sus raíces en el nacimiento del patólogo y biólogo austríaco Karl Landsteiner, a quien se le atribuye la contribución de tipificar los grupos sanguíneos ABO. Este descubrimiento le valió el premio Nobel de Medicina en 1930.
Karl Landsteiner, quien le dejó su legado a la humanidad con el descubrimiento y clasificación de los grupos sanguíneos, nació en Viena en 1868, y realizó sus estudios en la Universidad de dicha ciudad, en donde se graduó en 1891, según «Biografía y vidas».
Su descubrimiento se gestó cuando trabajaba como ayudante en el Instituto de Patología de Viena cuando identificó las diferencias de la sangre humana. Para el año de 1901 fue capaz de comprobar la existencia de, al menos, tres tipos de sangre distinguibles por la cantidad de antígenos contenidos en dicho fluido.
El Día Mundial del Donante de Sangre celebrado este 14 de junio es un movimiento que busca sensibilizar a las personas y, sobre todo, para establecer iniciativas destinadas a aumentar las donaciones de sangre mediante la ayuda de entidades gubernamentales, hospitales privados y entidades sanitarias.