De acuerdo con Ricardo Sosa, experto en seguridad y criminología, los $360,000 de la bandera pudieron invertirse en áreas prioritarias para el municipio, como la prevención de la violencia.
«Los datos de los homicidios, privaciones de libertad y hurtos suceden mayoritariamente en el municipio de San Salvador. Me parece una desconexión gastar $300,000 en una bandera, cuando se pudo haber invertido en programas de prevención de la violencia, como un albergue para alojar a mujeres víctimas de violencia», mencionó Sosa.
También explicó que el dinero pudo emplearse en capacitación de Adescos para alertar sobre violencia, ya que actualmente la alcaldía no tiene ningún programa de prevención.
«Estamos en pandemia, hay una cantidad de personas que han fallecido. Esto no es ser antipatriota, sino que indica que la alcaldía no tiene un plan estratégico de administración municipal. Como experto en seguridad, no comprendo esa decisión», dijo Sosa.
Además, indicó que en redes sociales se señaló que, en Guatemala, con $260,000, una cantidad menor al costo de la bandera, lograron invertir en ciencia y educación y construir el satélite Quetzal-1.