Después de concebir la idea de contar la historia de Juan Carlos «Pin» Plata, uno de los futbolistas más importantes de Guatemala, de más de un año de trabajo que incluyó 26 días consecutivos de filmación y de la presentación del tráiler del filme, el director del proyecto cinematográfico, Kenneth Müller, dedicó unas palabras para destacar el talento del equipo que participó en la producción. Sin duda, afirma el cineasta, se trata de una película que tocará el corazón de los guatemaltecos y de las personas que se identifiquen con una vida de retos y esfuerzos por alcanzar el éxito.
Además de seleccionar en Guatemala a los especialistas de cada departamento técnico y de un elenco de actuación que incluyó a una de las revelaciones del cine mexicano, Fernando Cuautle, para interpretar a Juan Carlos Plata; y a consagrados como el famoso actor mexicano-estadounidense, Leonardo García; Müller también dirigió su mirada hacia El Salvador para contar con el equipo de producción de Latitud Norte Films, y su director de fotografía, Santiago Gutiérrez; con el ganador del Oscar, André Guttfreund, como productor, y con Marta Elena García, quien se unió al equipo de actuación.
Precisamente, en unas recientes palabras, el director destacó el trabajo de los salvadoreños en su película, y resaltó que en nuestra región también se cuenta con un buen nivel de talento cinematográfico, a pesar de no contar con las condiciones o tradición de otros países más desarrollados en esta industria.
«Es normal pensar que las industrias como México o Argentina, que llevan años en la producción cinematográfica, contengan talentos que impresionen. Pero sí que me he llevado sorpresas increíbles», compartió el realizador sobre su experiencia con el equipo de trabajo en «Gol de Plata».
A continuación, dedicó palabras también para definir algunos de los roles en los que participaron los salvadoreños: «Tener al lado a mi maestro André Guttfreund, más allá de un lujo, fue alguien que no dejó, en ningún momento, que no probara más cosas, y que fuese más allá».
Sobre el director de fotografía también comentó: «Santiago Gutiérrez, nuestro gran maestro de la luz, me dio siempre un punto de vista distinto, encuadres que al conjuntarlos con el arte de María Andrea Brolo (directora de arte guatemalteca) se convertían en pinturas y no quedaba más que darle vida».
También se refirió al aporte en actuación de Marta Elena García, quien pudo debutar ante las cámaras de cine. «Deposité mucho mi confianza en Marta Elena, sobre todo porque brilla en cuadro y, aunque fuese su primera incursión en el cine, nos regaló varios momentos de realidad que conectaron muchísimo con el protagonista, tanto en su edad adulta como en la niñez».
«Ahora me encuentro trabajando la música (de la película) con el maestro Mauricio Trabanino (también salvadoreño), otro genio que ahora acompaña las imágenes y le da un sentido más profundo a nuestro cine», agregó el director.
La mirada del director de fotografía
Por su parte, el director de fotografía, Santiago Gutiérrez, expresó que es importante destacar el buen ambiente y la armonía que se generó entre los miembros del equipo de trabajo conformado por especialistas, cada uno en su área, originarios de Guatemala, El Salvador y México.
Además, Gutiérrez ofreció su análisis de los puntos claves que permitieron el nivel de calidad que la película presentará al público cuando la vea en la pantalla.
«Hay que destacar el aporte que cada uno dio desde su área. Por ejemplo, el equipo de actuación de México y Guatemala demostró un alto nivel de formación. En ese sentido, el director hizo un casting impecable y detalles como ese fueron claves para que el rodaje durara exactamente lo planificado», relató el director de fotografía.
«Fue bastante importante tener la experiencia de trabajar con el equipo de México que destacó con trabajos como el del asistente de dirección, Luis Jaimes, quien fue fundamental en el rodaje. Pero también fue muy importante todo lo que ofreció el equipo de El Salvador en la parte de fotografía, diseño de iluminación y el trabajo coordinado con un buen gaffer con la dirección de fotografía, arte y dirección. Definitivamente, tuvimos un equipo que demostró ser muy dinámico», detalló Santiago.
Para Gutiérrez, El Salvador y la región están viviendo un buen momento en cuanto a formación e inversión para poder desarrollar una verdadera industria de cine. «En El Salvador cada vez más tenemos personas con buena formación en cine, tanto dentro como afuera del país, y hay varios inversionistas interesados en producir. Con Latitud Norte Films pretendo seguir impulsando el trabajo cinematográfico, en cuanto a películas, series o documentales», explicó.
Para Santiago, la fusión de productores y cineastas en «Gol de Plata» demostró que existen las condiciones y el potencial para crear alianzas estratégicas que impulsen nuevos proyectos cinematográficos a escala regional, como también comparte Kenneth Müller al afirmar que: «El cine no tiene fronteras, somos una familia, de distintos padres y madres nada más».