Los casos de hurto y robo en el mercado de San Miguel han disminuido considerablemente en comparación con los registrados el año pasado, informó la Policía Nacional Civil (PNC). Del 1.º de enero al 31 de abril de este año solo se tiene el reporte de siete hurtos y tres robos, mientras que el año pasado en el mismo período se contabilizaron casi el doble, 12 hurtos y seis robos.
La autoridad informó que la presencia policial en las calles migueleñas ha contribuido para que los delincuentes eviten llegar a esos sectores a cometer delitos.
Asimismo, son apoyados por elementos del Cuerpo de Agentes Municipales (CAM) para que no ocurra ese tipo de hechos. «Es importante que las personas denuncien.
Nuestros compañeros que están en la caseta policial ubicada a un costado del mercado están pendientes de que ocurra algún hecho de este tipo y para capturar a los delincuentes. Si [este año] lo comparamos con el año pasado, han bajado [los casos]; ya no se diga [si se compara] con otros años», dijo la fuente de la PNC.
Añadió que el año pasado hubo capturas que vinculaban a colaboradores de pandillas que llegaban al mercado, rompían las carteras de las víctimas con una navaja y les sacaban el dinero. También se aprovechaban de la gran afluencia de personas en el mercado y, a punta de pistola o cuchillo, les exigían dinero a los compradores.
Una de las vendedoras contó que tiene meses de no escuchar que ha habido hurtos o asaltos en la zona. «Por lo menos acá no se ha escuchado que ha habido robo o que les han sacado el dinero o llevado la mercadería. Gracias a Dios vamos mejorando», opinó Mirna García, vendedora de frutas y verduras.
La captura de pandilleros en San Miguel también ha logrado disminuir dichos delitos. Las autoridades policiales esperan que con la detención de más delincuentes en el régimen de excepción, impulsado por el Gobierno del presidente Nayib Bukele, las cifras de hurto, robo y otros delitos sigan a la baja.
Además, las autoridades policiales afirmaron que la denuncia de la ciudadanía es importante para determinar zonas y horarios en los que ocurren los delitos.