SAN FRANCISCO, EE. UU. – La administración Biden estaría gastando cerca de 60 millones de dólares a la semana para brindar atención a unos 16.000 menores que han sido enviados a albergues o refugios operados por el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS por sus siglas en inglés), según un análisis de datos gubernamentales obtenidos por The Washington Post.
De acuerdo con el medio estadounidense, se espera que el gasto siga aumentando de manera significativa en los próximos meses. Esto debido al número récord de menores no acompañados que llegaron a la frontera en las últimas semanas.
Mientras que el HHS ya ha llenado las 7.700 camas disponibles en su red de refugios permanentes, donde según un análisis de datos gubernamentales el costo de cuidar a un niño es de aproximadamente 290 dólares diarios.
Actualmente la Administración ha habilitado al menos 10 grandes instalaciones de emergencia, creando 16.000 camas temporales para niños migrantes en centros de convenciones, campamentos de trabajadores petroleros convertidos y en bases militares. Aproximadamente 8.500 niños viven en estos sitios emergentes y 4.000 más esperan ser trasladados desde las estrechas instalaciones fronterizas.
Según los datos del Washington Post el costo de estos sitios de emergencia es un poco más del doble que el de los refugios más permanentes, y para reforzar esta afirmación citan las palabras de Kenneth Wolfe, portavoz de la Administración para Niños del HHS, quien recientemente explicó que el aumento se debía «a la necesidad de desarrollar instalaciones rápidamente y contratar personal significativo en un corto tiempo»,
El funcionario publicó también puntualizó que, de acuerdo con experiencias anteriores, el costo diario promedio por menor es de «aproximadamente 775 dólares».
Entonces, si se toma en cuenta lo revelado por el HHS, que los niños pasan un promedio de 31 días bajo la custodia de esa agencia, antes de ser entregados a un familiar o patrocinador elegible, el Gobierno estaría gastando alrededor de 24.000 dólares por cada uno.
De acuerdo con proyecciones del Gobierno estadounidense para septiembre, entre 22.000 y 26.000 menores no acompañados llegarán cada mes y requerirán atención del HHS.
Funcionarios de la Administración Biden han afirmado que no planean solicitar al Congreso fondos suplementarios para cubrir los costos de los sitios de emergencia.