La industria manufacturera nacional, y particularmente el sector textil, lidera los flujos de exportaciones y uno de sus principales compradores es Estados Unidos con el 68 % de las ventas, según datos a abril de 2022 del Banco Central de Reserva (BCR). De hecho, El Salvador se posiciona como el décimo país a escala mundial que más vende este tipo de productos a la nación norteamericana.
Solo en abril las ventas del sector textil salvadoreño ascendieron a $204.8 millones en la producción de T-Shirts de algodón; $105.9 millones en cuanto a chumpas y $75.2 millones en la producción de -Shirt de fibras sintéticas.
Sin embargo, el contexto actual ha hecho girar la vista de Estados Unidos hacia el Triángulo Norte de Centroamérica con una proyección de crecimiento y atracción de inversiones para esta industria, comentó la directora ejecutiva de Cámara de la Industria Textil, Confección y Zonas Francas de El Salvador (Camtex), Patricia Figueroa.
La ejecutiva explicó que la vista hacia Centroamérica deviene de la recomposición de la cadena de suministros, ya que ante las implicaciones adversas que dejó la COVID-19 y las dificultades logísticas en Asia, principalmente en el puerto de Shanghái en China, el gigante del norte está iniciando una estrategia de relocalización de sus inversiones en la región.
«Los Estados Unidos mira a la región como el mejor socio para fortalecer su plataforma de manufactura, y en este caso, de manufactura textil», afirmó la ejecutiva.
Figueroa informó que recientemente se reunió, junto a sus pares centroamericanos, con los representantes del Consejo Nacional de Textiles de Estados Unidos (NCTO, por sus siglas inglés) y que en julio partirá otra delegación de empresarios centroamericanos para continuar estos acercamientos que también incluyen al Congreso estadounidense.
INVERSIONES LOCALES
Por otra parte, la presidente de Camtex también señaló que, además de la búsqueda por atraer más inversiones, las que ya se tienen en el país han proyectado la inyección de capitales para proyectos de ampliación y modernización que ascienden a unos $50 millones.
«Tenemos proyecciones de expansión de algunas empresas, en tecnología o el reciente anuncio de una planta industrial, entre otros, o sea que hay movimiento, pero quisiera ver más y esperamos poder aprovechar este momento», afirmó.
Respecto a su vinculación con el Gobierno, la ejecutiva señaló que siguen trabajando activamente en temas de facilitación del comercio y que coordinarán con el Organismo Promotor de Inversiones e Inversiones de El Salvador (Proesa), la apuesta nacional de cara a la atracción de inversionistas estadounidenses.
Por otra parte, la industria textil, también es una de las principales generadoras de empleos del país, según Camtex con datos hasta enero de 2022, el sector brindaba 83,527 empleos directos, de los cuales el 63 % es ocupado por mujeres y el 47 % por hombres.