El ministro de la Defensa Nacional, René Francis Merino Monroy ha manifestado que la Fuerza Armada de El Salvador (FAES) ha aumentado las medidas de seguridad para el ingreso de nuevos miembros a la institución castrense.
«No vamos a tolerar a ninguna persona que se haya infiltrado, estamos tomando medidas para estar seguros», puntualizó el vicealmirante.
Merino Monroy indicó que han desarrollado un sistema que le permite a la FAES detectar a cualquier miembro de maras o pandillas que pretenda infiltrarse en las unidades de las Fuerza Armada.
Las depuraciones se efectúan a través de tres métodos; uno es por medio de la revisión de los antecedentes penales y policiales de los aspirantes, otro es por medio del propio sistema de la FAES que consiste en un fichaje de todas aquellas personas que anteriormente intentaron ingresar al Ejército y que en las pruebas de confiabilidad les detectaron algún vínculo, otra forma es luego de los resultados del polígrafo que arrojan las conexiones de los aspirantes con las estructuras terroristas.
«Cuando ellos intentan ingresar nuevamente vemos en ese sistema y aparecen bloqueados porque han tenido vínculos con las maras o pandillas, de esa manera nosotros detectamos a esta persona que quiere meterse a la institución y cuando se han dado algunos casos de que ya estaban en la Fuerza Armada, antes de que el señor presidente Nayib Bukele llegara al poder, porque no les hicieron los clareos respectivos, nosotros los expulsamos», explicó el jefe de la institución castrense.
«Entonces había alguna gente que estaba infiltrada y es a través de los métodos de contrainteligencia que los hemos ido detectando, los hemos ido sacando», agregó el funcionario.
Merino Monroy destacó que, desde finales de marzo con la entrada en vigencia del régimen de excepción, el combate a las pandillas y las reformas al Código Penal, cualquier vinculado con los terroristas y que pretenda infiltrarse en la institución es enviado a la cárcel, contrario a lo que ocurría con la ley anterior que solo lo ingresaba al sistema y lo bloqueaban.
En los gobiernos del FMLN fue cuando más terroristas se infiltraron a la FAES, entre el 2010 a 2018, un total 439 efectivos fueron separados luego de detectarles que tenían vínculos con las pandillas y se habían infiltrado; de los expulsados, dos eran subsargentos, otros dos cabos, mientras que el resto eran soldados, de acuerdo con datos oficiales.
El año que más soldados fueron apartados de las filas de la FAES fue el 2015 cuando registraron la expulsión de 64 miembros de la institución. Ese año, las pandillas provocaron más de 6,500 homicidios.
Según el reporte, los infiltrados se desempeñaban en gran parte de las guarniciones militares, ya sean estas brigadas, destacamentos, unidades logísticas, de Sanidad Militar, comando de Fuerzas Especiales, y hasta en los estados mayores de la Presidencia, de la Fuerza Armada y de la Fuerza Naval.