En entrevista con una televisora local, Alabi destacó que tal avance en la estrategia de vacunación de El Salvador permite al país estar «preparado» y «en condiciones» para afrontar una eventual alza de casos o la llegada de nuevas variantes de la enfermedad viral, como Ómicron.
«Un país puede decir que está preparado cuando se tiene un alto nivel de vacunación. En El Salvador tenemos cerca del 80 por ciento de primeras dosis, 72 por ciento de segundas dosis y cerca del 20 por ciento de terceras dosis», detalló.
El ministro reiteró que los salvadoreños que integran la población objetivo de la inmunización pueden recibir la tercera dosis a los tres meses de haber completado el esquema de vacunación con cualquiera de los inmunógenos que se aplican en el país.
La dosis adicional permite que los índices de anticuerpos se mantengan elevados y alcancen su nivel más alto, lo que permite enfrentar en mejores condiciones un contagio de COVID-19, explicó Alabi.
A la fecha, El Salvador ha aplicado 9.634.937 dosis de vacunas contra la COVID-19, incluidas 23,644 a turistas y extranjeros de paso por el país, cuya vacunación gratuita dispuso el gobierno salvadoreño en octubre.
Los casos confirmados de COVID-19 en el país centroamericano desde el inicio de la pandemia ascienden a 122,063, de los cuales 3.826 han muerto como consecuencia de la enfermedad.