A raíz de las medidas impulsadas en el país para contener la pandemia de la COVID-19, muchas empresas frenaron o minimizaron su actividad productiva durante algunos meses. Este impacto también desencadenó la suspensión temporal de contratos y de despidos laborales.
Frente a esta situación, el Gobierno desarrolló coordinaciones con el sector empresarial con miras a la reactivación económica ordenada, gradual y segura, que han permitido no solo la normalización paulatina del comercio, sino la recuperación de cientos de empleos que habían sido suspendidos.
Según informó ayer María Luisa Hayem, ministra de Economía, el 55% de los contratos cesados debido a la paralización nacional para contener la pandemia ya han sido reincorporados a sus puestos laborales.
La cifra positiva se debe, según la funcionaria, a que cuando las medidas de confinamiento se eliminaron, la capacidad de producción del país arrancó de forma casi inmediata.
«Esto lo habíamos visto cuando entramos al gobierno, implementamos acciones para acercarnos al sector empresarial, para crear planes de facilitación de comercio en conjunto, y eso hizo que la producción y las exportaciones también tuvieran ese comportamiento que estamos teniendo hoy por hoy», aseveró Hayem.
APOYO A EMPRESAS
La titular además recordó que los esfuerzos para inyectar capital a las empresas continúan y que solo a través del Fideicomiso para la Recuperación Económica de las Empresas Salvadoreñas (Firempresa) ya se han entregado $10 millones para pagos de medias planillas y créditos blandos a mipymes y al sector informal.
En este sentido, la titular espera que las proyecciones de la caída de la economía sean menores a las que se vislumbraban a principios de año. Actualmente, el Banco Central de Reserva (BCR) proyecta que el país cerrará el año con un descenso de entre -6.5 % y el -8.5 %, pero «estas proyecciones podrían variar», indicó la funcionaria.
«Hay gobiernos que deciden abrir la economía y eso es todo; aquí se dijo vamos a abrir la economía, vamos a darles el financiamiento que necesiten, cuando ya la pandemia estaba bajo control».
María Luisa Hayem, ministra de Economía.