El Salvador mantiene una epidemia de muertes por consumo de alcohol, según datos que reflejan las estadísticas que registran que, en lo que va de 2022, cerca de 1,000 personas han fallecido por causas directas e indirectas de la ingesta de esta sustancia.
La doctora Ileana Marroquín, psiquiatra de los Centro de Prevención y Tratamiento de Adicciones (CPTA) de Fosalud explicó que según los datos del Centro de Información y Asesoramiento Toxicológico (CIATOX), la tasa de incidencia es de 139 casos (nuevos de alcoholismo) por 100,000 habitantes, y la tasa de prevalencia son 258 casos por cada 100,00 habitantes, datos que clasificó como alarmantes.
«Dentro de la clasificación de muertes directas a la fecha, hay un total de 712 muertes registradas, y dentro de las muertes indirectas que son secundarias por ejemplo las consecuencias por consumo crónico que a la cabeza va la cirrosis crónica [pero hay otras enfermedades, aclara] hay un total de 312 muertes. Si sumamos los fallecimientos de las dos muertes directas e indirectas, van más de 1,000 personas fallecidas, solo en 2022», indicó.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el consumo de alcohol en las Américas es de aproximadamente un 40% mayor que el promedio mundial, el cual es un patrón dañino para la salud de la población que está asociado más de 200 condiciones como: «enfermedades no transmisibles, trastornos mentales, las lesiones y el VIH, así como la violencia doméstica, la pérdida de productividad, y muchos costos ocultos».
La doctora Marroquín indicó que las cifras nacionales son de las personas que han consultado, sin embargo, existe un subregistro de las personas que no consultan en los establecimientos de salud.
Agregó que, según el CIATOX, se registra que por Síndrome de Abstinencia por Alcohol hay 250 casos, de los que ha habido 63 fallecimientos; de los pacientes que a la fecha han consultado por intoxicación etílica aguda se contabilizan 821, de los que hay 63 fallecimientos; dentro de otros diagnósticos que van a la cabeza son los pacientes que están siendo diagnosticados con dependencia alcohólica, los cuales suman 3,215 casos registrados, y de estos ha habido un total de 350 fallecimientos.
«Podemos decir que seguimos en una epidemia por alcoholismo. La tasa de mortandad de los pacientes es 8.9 por 100,000 habitantes, y siempre existe el subregistro, porque estas son las personas que han consultado y han sido registradas. Estas son solo las estadísticas del sistema de salud, pero hay otro sistema de las muertes indirectas que pueden incluir las de accidentes de tránsito», detalló.
Ante esto, Fosalud a través de los CPTA continúa desarrollando acciones de prevención y dando tratamiento a las personas que deciden someterse a terapia para superar la adicción a esta sustancia. Por lo que se pretende hacer conciencia de los daños a la salud, la familia y la sociedad que genera el consumo del alcohol.
«Son centros que Fosalud ha creado para que el paciente pueda consultar y dejar si adicción. Sabemos que no hay en el sistema público más centros que puedan estar a la accesibilidad o disponibilidad del paciente, y los CPTA creados por Fosalud están tratando de realizar un gran impacto, ya que estas personas por lo general no pueden costear un proceso de rehabilitación [privado], y en estos centros el manejo es integral por profesionales de salud como médicos, psiquiatras, psicólogos, trabajo social para sacar al paciente de su adicción», puntualizó.
La atención en cada uno de los CPTA es gratuita, y las personas pueden acudir en horarios de 7:30 a 3:30 de lunes a viernes, sin cita y sin referencia.