Los murales, el deporte y la sana convivencia ahora son parte de los espacios pensados y diseñados especialmente para la niñez y la juventud salvadoreña. Este trabajo de recuperación de espacios, que antes no existían en las comunidades, es el que desarrollan los jóvenes que conforman el comité Gen Z de la colonia Zacamil.
El grupo se conformó hace un año y está integrado por 30 miembros, con edades entre los 14 y los 34 años. Todos son originarios de la colonia Zacamil. Algunas de las acciones que han desarrollado para recuperar espacios es la restauración de la casa comunal en la comunidad Los Próceres, que dejó de funcionar hace varios años, por lo que la readecuaron y han desarrollado un cine comunitario para niños y jóvenes.
Del mismo modo, han pintado murales en las comunidades con el apoyo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM, por sus siglas en inglés). En la misma comunidad han organizado un comité que cuenta con una escuela de fútbol, donde asisten 15 niños entre seis y 13 años. El espacio en el que entrenan fue recuperado por un profesor que es miembro de Gen Z.
Todas las acciones pretenden erradicar la violencia, ya que motivan la práctica del arte y el deporte. «Una de las misiones del comité es la prevención de la violencia. La idea es que los niños tengan lugares sanos, que sean propicios para su desarrollo, como este CUBO», informó Ismael Ortiz, presidente del comité Gen Z.
Este comité también coordina el Centro Urbano de Bienestar y Oportunidades (CUBO) de la colonia Zacamil, que fue construido por la Dirección de Reconstrucción del Tejido Social y se ha convertido en un espacio de aprendizaje, pues cuenta con un centro de cómputo que mantiene libre acceso a estudiantes y personas que desean trabajar.
Actualmente, este CUBO recibe un promedio de entre 170 a 200 visitas diarias, y ofrece clases de inglés, francés, diseño gráfico, talleres de rap, clases de «break dance», concursos, espacios para lectura y juego. «Por años nuestra colonia ha sido marginada por la violencia, por los problemas que han acontecido. Cuando uno se da cuenta de que hay un comité juvenil que puede transformar la colonia, eso motiva. En lo personal, busco crecer en la vida y Gen Z brinda la oportunidad de desarrollar talentos para ayudar a la comunidad», dijo Francisco Hernández Romero, quien forma parte del comité.