El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) le ha dado un guiño a las políticas injerencistas del Gobierno de Estados Unidos (EE. UU.) y también se acerca cada vez más al que hasta hace poco era su enemigo acérrimo: Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).
El exsecretario general del FMLN Medardo González, uno de los altos dirigentes políticos rojos, le dio un espaldarazo a las acciones que el Gobierno norteamericano está emprendiendo en contra del Gobierno del presidente Nayib Bukele.
«Estados Unidos ahora lo que ha hecho es publicar lo que ya sabía desde hace tiempo: publicar información de la corrupción desmedida de Bukele y de sus ministros», afirmó González el domingo pasado al participar en una marcha contra el Gobierno convocada por diversos sectores.
«No es cuestión de política exterior. Nosotros venimos acá y decimos Estados Unidos… todos los países del mundo saben que este Gobierno es un Gobierno corrupto», expresó. Estas declaraciones distan mucho del discurso del FMLN de hace apenas cuatro años, en febrero de 2017.
Cuando el propio González censuró a la entonces embajadora de EE. UU. en El Salvador, Jean Manes, porque eligió como director de un consejo juvenil, conformado por la sede diplomática, a Érick Ortiz, dirigente de ARENA, quien estaba encargado de seleccionar a jóvenes con capacidad de liderazgo. «Una embajada no puede hacer trabajo político.
Consideramos que es una actitud de intromisión, de injerencia. No debemos políticamente aceptar este tipo de injerencia», denunció en esa ocasión. También agregó: «Si aceptamos esto, entonces a partir de ahora cualquier embajada puede formar sus propios organismos para hacer política.
Es como que nosotros vayamos allá a Estados Unidos o a cualquier otro país y empecemos a crear organismos para hacer proselitismo». González, junto con diputados y exfuncionarios del FMLN, marchó en la movilización del pasado domingo organizada por sectores de oposición que respaldan las acciones del Gobierno de Joe Biden.
La embajada de EE. UU. intentó presionar al Estado salvadoreño por medio de la exencargada de Negocios Jean Manes, en temas sensibles del país, desde liberar a políticos detenidos por pactar con pandillas, la no ejecución de juicios contra exfuncionarios hasta la no reelección del fiscal general. El domingo, el presidente Nayib Bukele envió un mensaje en Twitter:
«Los contribuyentes estadounidenses deben saber que su Gobierno está usando su dinero para financiar movimientos comunistas contra un Gobierno democrático [y con un índice de aprobación del 90 %] en El Salvador.
Aunque no funciona. El pueblo de El Salvador no volverá a ese terrible pasado». Bukele acompañó el mensaje con fotografías de la marcha; incluyó la de un manifestante que lució una gorra roja con una estrella en la parte delantera y las siglas FMLN a un costado.
Este tenía de fondo la bandera de EE. UU., la que hace algunos años miembros del partido rojo quemaron en la calle. A las movilizaciones se unieron dirigentes y diputados del partido ARENA, que en 2009 veía al FMLN como su principal y acérrimo enemigo político.
Roy García, un operador político salvadoreño-estadounidense, llamó recientemente a ARENA y al FMLN a dejar sus diferencias y a unirse en las elecciones generales de 2024 para enfrentar a Nuevas Ideas.
«Tenemos que unirnos, ahorita es unirnos y competir juntos», expresó García en un video. «Dejemos a un lado nuestros colores y busquemos la democracia que teníamos antes del 1.° de mayo, para que podamos buscar en el futuro una presidencia», manifestó. García es procesado en ausencia por el delito de cohecho activo derivado de las prebendas que les ofreció a dos diputados de Nuevas Ideas, para dividir a la bancada.
La embajada de Estados Unidos en El Salvador se desvinculó de la reunión y de las dádivas ofrecidas a los legisladores, que enfrentan un antejuicio a petición de la Fiscalía, que los acusa del delito de cohecho impropio.