La Navidad de 2020 será recordada como atípica debido a las restricciones, precauciones y a los temores relacionados con la pandemia de la COVID-19, que hicieron de la época de celebraciones un vaivén de emociones. Es por ello por lo que las fiestas decembrinas de 2021 son esperadas por muchas familias. El virus sigue presente, pero su incidencia es menor frente a los niveles del año pasado, los planes de vacunación avanzan y la economía se acelera más de lo que estaba previsto, afirma una publicación de la revista financiera «Bloomberg».
En teoría, están dadas las condiciones para vivir una temporada de revancha. Los hogares cuentan con más recursos, la pandemia ha dado tregua y las autoridades han relajado las restricciones para facilitar la actividad económica.
AMENAZA LATENTE
A pesar de las condiciones idóneas para tener una Navidad en familia, con regalos para niños y grandes y llena de color, la dinámica del comercio internacional amenaza con que los regalos, los adornos y toda la parafernalia de la época no lleguen a tiempo. El colapso del comercio internacional en 2020 redujo la disponibilidad de contenedores para transportar mercancía, así como los barcos y, además, encareció los fletes para transportar de un puerto a otro.
De acuerdo con Compas, empresa colombiana que ofrece servicios logísticos a buques de carga, «se ha visto un incremento en los fletes marítimos para el transporte de mercancías en contenedores. Un contenedor que se contrataba por $5,000 desde China hasta Colombia ahora puede costar más de $18,000».
Este aumento es producto del represamiento en la atención de buques en los puertos más grandes de China, lo que hace que la carga y los contenedores estén estancados y aumente la demanda por parte de importadores y exportadores justo ahora, cuando las economías se están reactivando.
Esto debido al poco peso de Latinoamérica en el negocio de las navieras, que elimina la posibilidad de que la región pueda competir por los contenedores contra Europa y Estados Unidos, al representar como región solo el 4 % de su negocio.
Algunos analistas prevén que en el segundo trimestre del próximo año la situación podría estabilizarse, pero actualmente las dificultades logísticas y de disponibilidad de contenedores están afectando en gran medida el comercio mundial y ello está provocando el encarecimiento de los productos en todo el mundo. En este sentido, el presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Colombia (Analdex), Javier Díaz, considera que la oferta para la temporada de Navidad será menor de lo acostumbrado.
«Muchos de los productos que se requieren para la temporada navideña no van a llegar porque no hay la disponibilidad o de barco o de contenedores», aseguró.
Para quienes participan del comercio internacional es claro que las cadenas de suministro siguen traumatizadas. «De China hacia el resto del mundo, India, Asia Pacífico ni Estados Unidos hemos logrado restablecernos. Nos hemos recuperado frente a lo que teníamos hace un año, pero han aparecido otras complicaciones», dice Julio César Herrera, CEO de Global Energy and Production Company.
«Tenemos, por ejemplo, una crisis energética en China, no es solo los contenedores, sino la falta de gas y los precios del carbón. Eso ha llevado a que la producción de las fábricas de China, que van desde vasos y cucharas hasta iPhones, estén restringidas», explica Herrera.
Sobre lo que viene para la temporada decembrina, Herrera sostiene: «No vamos a tener el suministro de otros años, la demanda pospandemia no va a ser suficiente por los traumas de las cadenas de suministro. La crisis energética lo que hizo fue añadirle complicaciones al mundo, y en particular a todo lo que se produce en China».
INFLACIÓN COMO RESULTADO
Ante la dificultad para el comercio internacional y la poca relevancia de Latinoamérica para las navieras en el mundo, se está esperando que en la temporada de diciembre los precios sean altos. La inflación mensual de diciembre de 2020 fue de un 0.38 %, estuvo por encima de la de 2019, cuando fue de un 0.26 %, y reflejó el inicio de la reactivación económica.
Lo que espera la industria por ahora es que las dificultades de comercio internacional se mantengan, por lo cual la inflación de diciembre de este año podría ser particularmente alta, pues los hogares que experimentan una mejor situación financiera querrán consumir lo que la pandemia les privó.