El 17 de mayo de 1940, luego de la caída de Holanda, los nazis intentaron tomar el Palacio de la Corte Permanente de Justicia en La Haya, pero hubo un juez presidente que se quedó junto a sus oficiales holandeses para impedirlo y al momento que se acercaron a la puerta principal les dijo: «La Corte y su personal, conforme al acuerdo de sede, firmado con el Gobierno de Holanda y en base a normas consuetudinarias del derecho diplomático, son inviolables. Solo sobre mi cadáver pueden tropas extranjeras penetrar al Palacio».
Este juez fue el doctor salvadoreño José Gustavo Guerrero, quien desafió la irrupción de los hitlerianos. Al final, los nazis lograron entrar al edificio, pero el doctor Guerrero logró salvar los archivos y garantizó la protección de todo el personal.
Aunque este suceso ya era de dominio público, una reciente investigación arrojó nuevos datos que amplían la trayectoria diplomática y jurídica de Guerrero, los cuales integran el libro «Vida y obra del doctor José Gustavo Guerrero».
«La investigación duró aproximadamente un año y estuvo a cargo del director Alexis Mejía, pero también contamos con apoyo de jóvenes estudiantes de la carrera de Historia de la Universidad de El Salvador. Hay mucho que no se conocía. Se recopilaron imágenes nuevas e inéditas, se recuperó un vídeo que está disponible en la biblioteca virtual de Naciones Unidas Ginebra donde el doctor Guerrero justamente estaba poniendo la primera piedra de lo que ahora es el palacio de Naciones Unidas, en Ginebra», detalla Luz Elena de Saade, rectora del Instituto Diplomático Dr. José Gustavo Guerrero.
Dentro de la investigación, se recopila información histórica que formó parte de la Sociedad de las Naciones, también se encuentran fotografías digitalizadas que no se conocían en el país, así como una serie de participaciones donde estuvo involucrado el diplomático salvadoreño.
«Tuvimos la oportunidad de acceder por primera vez al archivo de ONU Ginebra […] De acceder a diferente documentación que el doctor Guerrero produjo o su participación como representante permanente de nuestro país ante este organismo internacional […] su participación en la décima Asamblea General de la Liga de las Naciones que le permitió ejercer, primero, la presidencia y, segundo, tener participación en un acontecimiento de altísimo peso para esta organización que fue la colocación de la primera piedra del Palacio de las Naciones, que fue la sede permanente de este organismo y que, hoy por hoy, pertenece a la oficina de ONU Ginebra», explica Alexis Mejía, director de la investigación.
Por toda la información recopilada, el análisis y el volumen del libro (producido totalmente en el país), el instituto diplomático es el primero en presentar de manera profunda la biografía y trayectoria del doctor, diplomático y juez. «El instituto es pionero en adaptar ese aporte académico a las relaciones internacionales de nuestro país, para que se divulguen esos aportes que el doctor Guerrero ha hecho», agrega Mejía.
A inicios de este año, el Ministerio de Relaciones Exteriores, por medio del instituto diplomático presentó el libro donde se documenta la vida y obra del diplomático salvadoreño. El libro se puede adquirir en el instituto y se encuentra disponible en las versiones inglés y español.
Lado humanitario
Gracias a un manuscrito (parecido a un diario de vivencias) del entonces Secretario General de la Sociedad de las Naciones donde describe las diferentes vivencias durante un viaje que realiza desde La Haya hasta Portugal para una conferencia que se iba a llevar a cabo sobre la Organización Internacional del Trabajo, se narra cómo en la frontera de España el doctor Guerrero ayuda a dos personas para que puedan entrar a ese país y, de alguna manera, resguardarse de todas las situaciones que estaban ocurriendo dentro de la guerra. Por medio de este escrito se le pone nombre y rostro a las personas a quienes ayudó. Y aunque son los únicos que se encuentran documentados, no se descarta la posibilidad que ayudó a más personas.
Carrera y trayectoria
Se conoce que Guerrero tiene una trayectoria diplomática en países como Francia, Italia y España, pero la pesquisa detalla otras naciones donde ejerció su carrera consular. De igual manera, al acceder por primera vez a los documentos del archivo de ONU Ginebra se puede conocer cómo se realizaron los procesos de elección de los jueces de la Corte Permanente de Justicia Internacional y de la Corte Internacional de Justicia, cuál fue la aceptación que el doctor Guerrero logró en esos espacios para poder llegar a acceder a cargos como juez de la Corte Internacional de la Corte Permanente y cómo se convierte en presidente y vicepresidente de las diferentes cortes.
La diplomacia como negociación
Por medio de los diversos informes que anualmente se redactaban por parte de la Corte Permanente de Justicia Internacional hay uno que cubre el período de 1939 hasta 1945, donde se detallan algunos acontecimientos que ocurrieron cuando la Alemania nazi invade los Países Bajos. En el documento se precisa que, de alguna manera, se establece un diálogo entre el doctor Guerrero como presidente de la Corte Permanente de Justicia Internacional para que él, los archivos y el personal que se encontraba trabajando dentro de la Corte pudieran trasladarse a Ginebra para resguardarse del conflicto.
Defensa del país
Uno de los primeros hitos internacionales que se le atribuyen al doctor Guerrero es el hecho de haber defendido a El Salvador en el caso de Ambrosio Canessa y el logro que obtuvo. Entre los aportes principales que arrojó la investigación se conocieron puntos específicos sobre este caso, las diferentes demandas que hubo y la posición que tuvo el doctor para defender los intereses del país.
Legado
En la Corte Internacional de Justicia se encuentra un legado completo de jurisprudencia creada por el doctor Guerrero, donde se detalla la participación en los diferentes juicios internacionales, que ahora se convierten en grandes líneas de futuras investigaciones.
El instituto diplomático
En 2011 nació el Instituto Especializado de Educación Superior para la Formación Diplomática. En 2022, siempre manteniendo su naturaleza jurídica, pasa a llamarse Instituto Diplomático doctor José Gustavo Guerrero, como un homenaje al ilustre diplomático y jurista salvadoreño.
Como toda institución de educación superior, tiene, entre otros mandatos, el de la investigación de la historia diplomática del país. En este contexto, el año pasado se desarrolló el proyecto para recopilar la vida y obra del doctor José Gustavo Guerrero.