El papa Francisco rezó el domingo por las víctimas de la viruela símica, afirmando que esta enfermedad es «ahora una emergencia sanitaria mundial».
«Rezo por todos los infectados, especialmente la población de la República Democrática de Congo, que tanto ha sufrido. Expreso mi cercanía a las iglesias locales de los países más afectados por esta enfermedad», afirmó al final del rezo semanal del Ángelus.
Ante el aumento en la República Democrática del Congo de los casos de mpox, que también se propaga por Burundi, Kenia, Ruanda y Uganda, la Organización Mundial de la Salud decretó el 14 de agosto una emergencia sanitaria pública internacional, el máximo nivel de alerta.
La agencia sanitaria de la ONU también instó a aumentar la producción de vacunas de la mpox.
«Animo a los gobiernos y a la industria privada a compartir la tecnología y los tratamientos disponibles para que nadie carezca de atención médica adaptada», afirmó el jesuita argentino.
Aunque la mpox se conoce desde hace décadas, bajo el nombre de viruela símica, el reciente aumento de casos se debe a una nueva variante más mortal y transmisible, llamada clado 1b.
La tasa de mortalidad del clado 1b es de un 3,6%, según la OMS.
En República Democrática del Congo, el virus ha matado a más de 570 personas en lo que va de año.
El primer caso en Europa se registró en Suecia el 15 de agosto.
El virus puede transmitirse de animales a personas, pero también entre personas a través de un estrecho contacto físico.