El Fondo Monetario Internacional (FMI) informó ayer que se alcanzaron acuerdos preliminares con el Gobierno de El Salvador que tienen como objetivo el crecimiento económico y el bienestar de todos los salvadoreños, y están encaminados a «mejorar el balance primario en torno al 3.5 % del producto interno bruto (PIB) en un período de tres años» y establecer «una estrategia plurianual y comprensiva para mejorar la gobernanza, la transparencia y el clima de inversión».
La declaración oficial del organismo financiero internacional fue emitida tras realizarse «conversaciones personales y virtuales» durante los últimos meses por su misión, encabezada por Raphael Espinoza, con las autoridades del Gobierno del presidente Nayib Bukele.
«Desde el punto de vista fiscal, se ha llegado a un acuerdo preliminar para mejorar el balance primario en torno al 3.5 % del PIB en un período de tres años, con el fin de situar la deuda pública en una senda sostenible», puntualiza el comunicado del FMI.
«Se espera que la consolidación se logre a través de un conjunto equilibrado de medidas, centrándose inicialmente en la racionalización de la masa salarial pública, al tiempo que se deja espacio para gastos sociales y de infraestructura críticos», añade el organismo.
Tras informar del acuerdo preliminar en el ámbito estructural «para mejorar la gobernanza, la transparencia y el clima de inversión», el FMI también resaltó los avances que el Gobierno de Nayib Bukele ha hecho en estas áreas.
«Las autoridades han avanzado en la preparación de propuestas legislativas para abordar la corrupción, las vulnerabilidades en materia de blanqueo de dinero y las deficiencias de los marcos de contratación pública», pondera el FMI.
«Esta labor cuenta con el apoyo de socios externos para el desarrollo y pretende garantizar que los marcos establecidos estén en línea con las mejores prácticas internacionales», señala.
La misión del FMI y el Gobierno también avanzaron «en el desarrollo de un plan para reforzar gradualmente las reservas del sistema financiero de forma consistente con la continuación del crédito al sector privado y el crecimiento».
«Esto también está siendo apoyado por esfuerzos centrados en reducir el financiamiento doméstico al Gobierno a través de la consolidación fiscal prevista y el apoyo financiero que podría ofrecer el FMI y otros bancos multilaterales de desarrollo», valora.
La misión del FMI reconoce en su comunicado oficial, el cual fue compartido por el presidente Bukele en X, que tras las conversaciones sostenidas «se ha progresado en las negociaciones para un programa que podría ser apoyado por el Fondo, centrado en políticas para fortalecer las finanzas públicas, reforzar las reservas bancarias, mejorar la gobernanza y la transparencia y mitigar los riesgos del bitcóin».
De hecho, la adopción del bitcóin como moneda de curso legal fue otro tema abordado. El organismo financiero internacional manifestó en abril pasado que «abordar los riesgos derivados del bitcóin es un elemento clave de nuestras conversaciones con las autoridades».
El Salvador es el primer país en adoptar la cripto como moneda de curso legal y de uso irrestricto en el mercado nacional desde septiembre de 2021.
En su comunicado de ayer, el FMI plantea que «muchos de los riesgos asociados no se han materializado», por lo que «discusiones adicionales serán necesarias sobre este y otros temas claves».
Por otra parte, la misión del Fondo resaltó el buen camino que llevan las conversaciones con las autoridades salvadoreñas y los beneficios que estas podrían tener para el país.
«Estas discusiones se centraron en las políticas que podrían ser apoyadas por un programa del FMI para hacer frente a los desequilibrios macroeconómicos y fortalecer las perspectivas de crecimiento a mediano plazo y la resiliencia de El Salvador».
El organismo financiero mundial finaliza su comunicado indicando que «el equipo del FMI espera avanzar dichas discusiones con las autoridades salvadoreñas con el objetivo de alcanzar un acuerdo sobre políticas que garanticen la estabilidad y prosperidad en beneficio de toda la población salvadoreña».