Cinco códigos fueron actualizados en los primeros 10 meses de trabajo de la Asamblea Legislativa, con mayoría del partido Nuevas Ideas, al que la población otorgó las llaves de las mayorías simple y calificada para el período 2021-2024.
Salud, Civil, Penal, Procesal Penal y Comercio son las normativas modificadas en algunos de sus artículos para adecuarlas a la realidad de El Salvador.
Además, se analiza un pliego de reformas al Código de Trabajo y una subcomisión se encarga de las reformas más amplias al Código Civil.
Una de las grandes reformas aprobadas fueron los artículos 32 y 34 del Código Procesal Penal, que permitió la no prescriptibilidad de los delitos relativos a la administración pública (corrupción).
La propuesta llegó a la Asamblea por medio del ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro, y fue un parteaguas para el combate frontal de la corrupción.
La tipificación en el Código detallaba que al pasar 10 años del cometimiento de los hechos estos prescribían y no se podían judicializar.
Los diputados también acordaron que dicha reforma tuviera efecto retroactivo, con lo que se abre la posibilidad de que casos anteriores fueran abiertos y llevados a los tribunales.
De este mismo Código también se aprobó la adición de cinco nuevos artículos relativos a la evidencia digital.
«Hemos dado un gran paso en la transformación y la modernización de nuestro sistema judicial», expresó Villatoro al conocer la aprobación del pleno legislativo.
«Estas herramientas nos permitirán responder de mejor forma a los casos y a las conductas criminales de la actualidad», añadió. La oposición política desmeritó y cuestionó la reforma.
En el caso del Código Penal, la Asamblea acordó aumentar las penas por conducción peligrosa.
La reforma se orientó a generar la toma de conciencia de los motoristas para no ingerir bebidas embriagantes o drogas al conducir.
El artículo 147-e cataloga la conducción peligrosa con pena de prisión de entre dos a cuatro años, y si esta es por un motorista del transporte público de pasajeros o del transporte de carga, aumenta a penas de entre tres a seis años.
Siempre en el Código Penal, los diputados también acordaron reformar varios artículos relacionados con la portación y la conducción ilegal de armas de fuego. Con estas modificaciones se presentan las herramientas jurídicas a la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fiscalía General de la República (FGR) para combatir la portación irregular de armas de fuego.
La tercera modificación se aprobó para sancionar con penas de prisión de entre dos y cuatro años el maltrato animal.
El Código de Comercio es otra ley secundaria que la Asamblea Legislativa actualizó. Las reformas se impulsan en dos áreas: los títulos valores emitidos por sociedades, y la armonización de las reformas a la Ley contra la Usura.
Con respecto a esto último, la apuesta fue armonizar el Código de Comercio como marco de la Ley contra la Usura, que se reformó en las tasas de interés y el anatocismo (interés sobre interés).
Sobre este aspecto, la Asamblea también reformó el Código Civil para que ambas leyes secundarias se complementaran con la Ley contra la Usura.
El Código de Salud cierra la lista de los cuerpos normativos modificados. En este caso, se actualizó en lo relacionado con la integración del Instituto Salvadoreño de Rehabilitación Integral (ISRI), ya que, si bien definía la representación de un miembro proveniente de la empresa privada, el mecanismo de elección lo atribuía directamente a la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP).
Con estas modificaciones legales, los cuerpos normativos comienzan a adecuarse a los escenarios actuales de la sociedad salvadoreña para contribuir a su desarrollo.