Garantizar la seguridad alimentaria de los salvadoreños es parte de la visión del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (CENTA), para lo cual ha redoblado esfuerzos en la aplicación de tecnologías en diferentes rubros de la agricultura.
Para lograr ese objetivo, la institución le sigue apostando a las investigaciones y al desarrollo de fertilizantes y productos agroecológicos que, además de proteger los suelos y el medioambiente, cuiden el bolsillo de los pequeños productores nacionales.
De igual manera, en este 2022 el CENTA busca el desarrollo de cultivos híbridos con miras a lograr la resistencia de plantas como maíz y trigo al cambio climático.
De acuerdo con Edgardo Reyes, director ejecutivo del CENTA, la apuesta por nuevas tecnologías es necesaria ante los retos que impone el cambio climático y las nuevas formas de producción agrícola a escala global.
En este escenario, los esfuerzos incluyen el involucramiento de expertos y otros actores que trabajan por el futuro de la agricultura.

«Para este mes de enero estamos organizando una conferencia donde vamos a invitar a todos los investigadores y extensionistas que han trabajado en ese tema para que nos den soluciones y tecnologías que podamos implementar a nivel nacional», aseguró.
De acuerdo con Reyes, los granos básicos son los que más se cosechan en el país y, por lo tanto, los más importantes; seguido de las hortalizas que se cosechan principalmente en la zona norte y en la parte de los frutales; y el cacao.
«A todos estos cultivos debemos buscarles alternativas con biofertilizantes y productos agroecológicos que permitan a los agricultores seguir produciendo a un costo accesible para ellos», manifestó.
Para hacer frente a los nuevos retos tecnológicos, recientemente el CENTA abrió un laboratorio de microbiología para identificar cepas de hongos, bacterias y virus.
De igual manera, con 40 agencias de extensión -promotores de desarrollo comunitario- distribuidas en cuatro regiones en todo el país, pretende acercar más a capacitadores que ayuden a pequeños productores.
«Desde el punto de vista de extensión tenemos varios retos, uno de ellos es que todas las agencias tengan al menos cinco extensionistas, ya que actualmente hay un promedio de tres», indicó el director del CENTA.
Los extensionistas agrícolas del CENTA trabajan de la mano con productores nacionales en la solución de problemas en las diferentes cosechas.
La economía familiar
Uno de los objetivos prioritarios de esta institución, es proteger la economía familiar, por este motivo, trabaja en necesidades puntuales de productores según el clima que predomine en sus lugares de residencia.
En este sentido, trabaja en un proyecto denominado Reclima, junto a la Organización de las Naciones Unidas Para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Fondo Verde y el Fondo de Inversión Ambiental de El Salvador (Fiaes), que involucra a extensionistas y a líderes comunitarios.

«Lo que necesitan las familias es tecnología adecuada a la región donde producen, sabemos que El Salvador es relativamente pequeño, pero tiene condiciones diferentes, por ejemplo, la zona del corredor seco es muy diferente a la de San Andrés, entonces se están desarrollando variedades e híbridos adecuados a esa zona», afirmó.
En cuanto al objetivo de fomentar el trabajo agrícola entre la juventud salvadoreña, Reyes manifestó que «tenemos un proyecto de sucesores que la idea es incentivar a los jóvenes, queremos que ellos vean en la agricultura un futuro, buscarles alternativas y que vean que la agricultura es rentable».
Otra apuesta, consiste en implementar el «extensionismo virtual», ya que, según Reyes, la mayoría de los agricultores o sus hijos tienen un teléfono inteligente. El CENTA ya implementa un plan piloto de este proyecto en el municipio de Tacuba, Ahuachapán.
«Les he pedido que después abramos un piloto en cada una de las regiones y después nos vamos a extender a cada una de las agencias de extensión con más cobertura, más rapidez y asesoría personalizada», exteriorizó.
Plan maestro
El Plan Maestro de Rescate Agropecuario, una ambiciosa estrategia del Gobierno actual para lograr la seguridad y soberanía alimentaria de El Salvador, también contempla apoyo al CENTA como institución que vela por el uso de la tecnología en la agricultura nacional.
«Se formará el Centro de Investigación y Educación Agropecuaria, incluido en el plan de Gobierno donde se realizará tecnología apropiada», aseguró Reyes.
El director del CENTA dijo, además, que el plan contempla convertir a la institución en un referente regional en investigación y extensión.