La primera vez que Aldo Merino tuvo un acercamiento con este peculiar objeto fue en 2006, cuando vio a un francés haciéndolo vibrar.
Desde entonces sintió que debía tener uno en su vida no solo por sus propiedades meramente musicales, sino porque considera que es algo que conecta con el propio ser.
El hang, comparte Merino, aunque para muchos es un instrumento musical, está registrado como arte. Sus orígenes tienen influencia de la música calipso (propia de Trinidad y Tobago) y a los steelpan, que se tocan con mazos.
El hang fue pensado para hacerlo sonar con las manos y fue creado en 2000 por dos luthiers (artesanos de instrumentos musicales): Felix Rohner y Sabina Schärer.
LEA TAMBIÉN: El cantautor salvadoreño, Joaquín Velazco, presenta «Confesión»
«De hecho, sus creadores no lo ven como un instrumento, sino como una obra de arte. Y es por eso que es raro. No lo hicieron masivo para que no perdiera su esencia como elemento artístico», explica Aldo.
Es altamente codiciado. Él solicitó adquirirlo en 2009, y aunque le dijeron que sí era posible, tenía que esperar aproximadamente cuatro años para tenerlo, pues la lista de espera era larga.
«Actualmente es difícil saber cuántas personas lo tienen. Antes llevaban una cuenta. Por ejemplo, en 2014 yo era el 500», afirma.
UNA ESPERA QUE VALIÓ LA PENA
Su melódico y atrapante sonido es el resultado de un trabajo manual delicado y minucioso, artesanal. «Son instrumentos muy delicados, porque si se golpean se desafinan», asegura.
«Cuando ya me confirmaron que estaba listo, fui a traerlo personalmente a Cantabria, España, y fue una experiencia bien bonita porque la persona que me lo vendió me mostró varios y me dijo que los tocara y que con el que yo sintiera una conexión esa sería la pieza indicada. Entonces, empecé a probarlos y encontré la mía. Esto fue a inicios de 2014», recuerda. Y agrega: «Yo toco percusión y batería en otros grupos. Aunque para tocar este tiene su propia técnica y debes conectar con el instrumento. Después de un rato, yo me sentí identificado con el hang que escogí».
Se diferencia de otros instrumentos de percusión por su sensibilidad. El material, la temperatura con la que lo hicieron, la resonancia, todas esas cosas tienen valor para escoger el mejor ejemplar.
INDESCRIPTIBLE CONEXIÓN
Con una forma similar a la de un platillo volador, el sonido que transfiere, para muchos, es mágico, suave, dulce y hasta cósmico.
Tanto que ha sido usado para propósitos terapéuticos y de meditación en sesiones de yoga, por ejemplo. El hang también tiene otra variable llamada oval.
El oval es el primer handpan digital y electrónico, y para usarlo debe tenerse una aplicación instalada en un dispositivo. Así se aprecia mejor la resolución del sonido. «El hang está pensado en una sola escala, y con el oval podemos tener varias escalas en uno solo», describe Merino sobre sus distinciones.
Actualmente estima que son 500 los oval que existen en el mundo. «Soy músico. He colaborado también en otros grupos como Los Tachos y Manyula Dance Club. He tenido varios proyectos y en algunos los introducía y los usaba de manera más personal, porque el instrumento, como ya lo había dicho, es una obra de arte, y ellos lo ven como para meditación, y yo también lo pensé así».
Este arte ha acompañado a Aldo también en su formación profesional. Cuenta con dos maestrías en Medio Ambiente, pero no por ello ha dejado de lado su pasión por la música.
En 2018 lanzó su primer disco con hang como instrumento principal. Lo tituló «Hangtrospection», porque es un juego de palabras entre hang e introspección.
«A través del hang pude expresar las emociones y los sentimientos que yo tenía en esos momentos», dice. «Hangtrospection» está disponible en YouTube, Deezer y iTunes. Como proyectos que se avecinan, cuenta que para este año quiere grabar dos videos del disco «Hangtrospection», y está trabajando en más canciones de un nuevo álbum, para el que espera tener colaboraciones con otros artistas.
Fotos: DES/Huber Rosales
SOBRE EL ARTISTA:
Nombre: Aldo Merino
Profesión: ingeniero químico con dos maestrías en Medio Ambiente estudiadas en Alemania y Brasil. Músico y percusionista
Debut: 1998 con la batería
Género: reggae
Edad: 37 años
Origen: San Salvador, El Salvador