La amenaza de inundaciones era un problema al que se enfrentaban los habitantes de La Cima durante la época lluviosa. Por casi 20 años, fueron testigos de cómo la bóveda no tenía la capacidad hidráulica suficiente para drenar la cantidad de agua. A esta situación se sumaba el incremento de basura en la zona, agravando el problema al punto de que tuvieron que dinamitar la bóveda para destaparla.
Decenas de peticiones fueron enviadas a las autoridades de esa época, sin obtener respuesta. Sin embargo, los líderes de las directivas explicaron que fue hasta que hicieron la petición al actual ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, que obtuvieron una respuesta inmediata.
«Nosotros nos reunimos con el ministro Romeo Rodríguez, él está atento a escuchar a las comunidades. Su respuesta fue inmediata. Antes, acercarse a un ministro era imposible. Con este gobierno se ha tenido más apertura, escuchan a las comunidades», detalló Mercedes de Dabura, líder de las directivas de la residencial La Cima.
Ella recuerda que en ese momento le expusieron al ministro Rodríguez que los desbordamientos ponían en riesgo las casas aledañas a la quebrada y a los conductores, ya que la calle de acceso a dicha residencial está sobre la bóveda principal.
El ministro les anunció que construirían una obra de protección integral para evitar el riesgo, la cual fue entregada en julio de 2022. El Ministerio de Obras Públicas (MOP) invirtió $554,876.82 en la reconstrucción de obras sobre la quebrada El Garrobo y sobre el cauce que conduce a la bóveda sobre la calle San Nicolás. También se hicieron los muros guarda nivel que reducen la velocidad con la que puede llegar el agua al sistema de drenaje y un sistema de protección de taludes.
«El impacto ha sido positivo porque tenemos más seguridad. Ya no hay riesgos que afecten a los habitantes y de inundaciones. Con el nuevo sistema ha disminuido la obstrucción de la bóveda. Cuando se acumula basura, inmediatamente viene el FOVIAL», indicó Mercedes.
La misma valoración tiene Francisco Vásquez, representante de las directivas de La Cima, quien explicó que el problema de la capacidad hidráulica ha sido resuelto con la obra de mitigación. «Nos sentimos muy agradecidos por como las instituciones del Estado reaccionaron a este problema, porque la situación del año pasado fue bastante crítica con la tormenta Amanda», indicó Vásquez.
El habitante también indicó que han percibido el cambio en el clima de seguridad en la residencial, pues con el régimen de excepción, los grupos terroristas han dejado de intimidar en las zonas de los accesos.